El
Stingray 2020 alcanza el destino último del Corvette
El Corvette Stingray 2020 de Chevrolet es el resultado de 60 años
de experimentación con el motor central. Mientras que el Corvette de
octava generación marca un avance radical en términos de capacidad
a partir de la séptima generación, también incorpora las lecciones
aprendidas de los ejercicios de ingeniería pasados, tal con los
Vehículos de Investigación Experimental de Chevrolet (CERV, por sus
siglas en inglés) I-III, Aerovette y otros.
Zora
Arkus-Duntov, considerado el padre del Corvette, conoció vehículos
de motor central por primera vez en su juventud, con los vehículos
de carreras de Grand Prix Tipos C y D de la Auto Unión.
Duntov
tenía gran conocimiento sobre propulsión y prosperó como corredor
de carreras y asesor en ingeniería automotriz y aeronáutica. Se vio
atraído por GM dado el concepto del Corvette original, el cual vio
en Motorama 1953 en el Waldorf Astoria de la Ciudad de Nueva York.
Duntov
comenzó a trabajar en GM el 1 de mayo de 1953 y ayudó al ingeniero
jefe de Chevrolet Ed Cole a convertir su propuesta de un Bloque
Pequeño V8 en una tecnología viable para el Corvette más tarde en
esa misma década. Duntov se convirtió en el primer ingeniero jefe
de Corvette y se dedicó a conseguir la distribución de motor
central a través de diversos conceptos, incluyendo el CERV I que
debutó en 1960. Duntov lo describió como "un diseño sin
límites" y una "herramienta admirable" para enseñar
a Chevrolet acerca de "qué poner en el Corvette".
El
CERV I estuvo equipado con siete combinaciones diferentes de motor
mientras estuvo en funcionamiento, pero su motor original, un Bloque
Pequeño V8 de Chevrolet y su núcleo de aluminio liviano están
modernizados en el Corvette Stingray 2020.
En
1964, el equipo de Duntov debutó con el CERV II, el cual Duntov y el
Gerente General de Chevrolet Semon "Bunkie" Knudsen
imaginaron como un contrincante en Sebring, Le Mans y otras carreras.
Con los convertidores de torque delanteros y traseros, el CERV II
empleó el primer sistema de tracción en las cuatro ruedas con motor
central, del cual Duntov se hizo poseedor de la patente.
El
intento más reciente de un vehículo con motor central había sido
el concepto del CERV III en 1990, construido junto con Lotus con el
fin de explorar futuros niveles de rendimiento. El CERV III, un auto
para ruta más que para pista, tenía por objetivo ser desarrollado
como un vehículo para evaluar estructuras con motor central. El CERV
III estaba alimentado por un motor de Bloque Pequeño V8 de 5.7L con
doble árbol de levas en cabeza, 32 válvulas y dos turbocompresores.
Producía 650 HP y 665 libras-pie de torque.
Duntov,
quien se retiró de General Motors en 1975, consideró que la
distribución de motor central con el motor ubicado adelante del eje
trasero era la configuración óptima para la distribución del peso,
excelente manipulación y visibilidad de frente. A pesar de los
beneficios de rendimiento innatos de la distribución, su
implementación en el plan de fabricación masiva resultó ser
problemática. Los Corvette con motor central anteriores fueron
relegados a un estado de concepto debido a cuestiones que incluían
dificultades en el enfriamiento del motor, espacio limitado para los
pasajeros y el equipaje, el ruido y la incapacidad de producir una
variante convertible.
Los
avances en el desarrollo, junto con la ingeniería asistida por
computadoras y la realidad virtual, ayudaron al equipo Corvette
actual a elaborar la arquitectura del Corvette Stingray 2020 de
Chevrolet. Los ingenieros trabajaron de cerca con diseñadores a modo
de asegurar que la forma del vehículo cumpliera con todos los
parámetros de rendimiento necesarios, a la vez que se preservaba el
legado Corvette.
El
motor central siempre fue una meta en el destino del Corvette. El
Corvette Stingray 2020 de Chevrolet satisface la visión de miles de
personas que llegaron antes que él y está a la altura de los
principios básicos clave de desempeño, funcionalidad y
accesibilidad de Corvette.