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La suba del dólar finalmente encontró un freno. La razón, según explicaron en la city porteña, tiene que ver con una actitud más activa del BCRA para quitar liquidez: vía las Leliq absorbió $140.000 millones. Teniendo en cuenta que el vencimiento estaba en torno a los $90.000 millones, retiró en términos netos un caudal importante de pesos. Además dejó de bajar las tasas e incluso las subió levemente: pagó 61,248% para captar esos pesos a los bancos.
“Después de la fuerte expansión de la semana pasada y tras la mayor volatilidad del tipo de cambio, el BCRA vuelve a absorber pesos en forma significativa y se frena la baja de tasas”, reseñó Gabriel Caamaño, economista de la Consultora Ledesma.
El especialista agregó que fue la mayor absorción monetaria neta vía Leliq en la última quincena. En particular, hay que irse al 13 de noviembre para encontrar una absorción neta superior.
De esta manera, el dólar mayorista cayó cincuenta centavos hasta los $38,55. El volumen negociado en el segmento de contado fue de US$ 606,17 millones y en futuros MAE se hicieron otros US$ 310,20 millones. “Con un recorrido errático y mixto, la divisa norteamericana corrigió parcialmente la fuerte suba iniciada desde las cinco jornadas anteriores”, indicó Gustavo Quintana, operador de PR Cambios.
Para el que no la captó, hoy tuvimos la mayor absorción monetaria neta vía LELIQ en la última quincena. En particular, hay que irse al 13/11 para encontrar una absorción neta superior.
Con respecto al dólar minorista, el billete bajó a $39,58 (-40 centavos) según el promedio que elabora el BCRA. Mientras tanto, en el mercado informal, el denominado “dólar blue” quedó en $37,75, también a la baja.
Más temprano a la mañana el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, había salido a ponerle paños fríos al tema del dólar. Aseguró que en el gobierno están “muy tranquilos por el movimiento muy suave” registrado por el dólar en las últimas jornadas y afirmó que no existen causas para preocuparse.
Dujovne reafirmó que la suba de la divisa estadounidense de los últimos días “se debe a la oferta y demanda del mercado”, por lo que en el Gobierno están “muy tranquilos con el tipo de cambio, moviéndose muy suave dentro de la zona de no intervención”.
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