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“La inflación esperada por el mercado para todo el 2018 es del 30%” según informa el Banco CentralP0F1P y la movilidad será del 28,83%.
El Gobierno Nacional aplica desde marzo la nueva fórmula de movilidad para las jubilaciones: compuesta en un 70% de la variación de precios que informa el INDEC y el 30% de un índice salarial publicado por la secretaría de Seguridad Social denominado RIPTE (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables).
El principal problema es que se genera un atraso entre que se produce el aumento de los precios y se traslada la medición a los jubilados.
En el esquema actual los precios suben durante 9 meses y en marzo se paga solo la medición de julio a septiembre del año anterior.
El último aumento que recibieron los jubilados antes del cambio de fórmula fue en septiembre de 2017, desde entonces hasta hoy, las jubilaciones subieron solo un 11,4%.
La razón esgrimida para el cambio de fórmula fue que no se volviera a repetir la pérdida del poder adquisitivo ocurrida en los años 2014 y 2016. Al momento del debate por el cambio de fórmula, Basavilbaso afirmó que “Hubo años en que la fórmula perdió contra la inflación y el jubilado perdió poder de compra”P1Fx2P.
Por ello tomamos la comparación con la inflación desde enero de 2016 ya que entendemos que el cambio estaba motivado en corregir ese problema.
Si consideramos desde el último aumento del método anterior los jubilados perdieron más del 10% de su poder de compra.
Esto resulta en una caída peor a la que se suponía debían corregir.
Las afirmaciones de la ANSeS apenas hace 3 meses.
En el mes de abril el titular de la ANSeS, Emilio Basavilbaso, afirmó que “la movilidad va a estar cuatro puntos por encima de la inflación”P2F3P.
Si terminamos el año con un 30% de inflación, los jubilados cobrarán 8% menos que en diciembre de 2015.
La fórmula originaria del Poder Ejecutivo Nacional que presentó el Ministro de Trabajo, Jorge Triaca en el Congreso, que luego fue modificada por el Senador Miguel Ángel Pichetto, se limitaba a transferir la inflación más una ínfima parte del aumento del PBI, que hubiera dado a hoy una movilidad del 29,65%. Ligeramente mejor que el “esquema superador” que sancionó el Congreso.
El ahorro del Gobierno.
Con el cambio de fórmula, lo que se hizo fue dividir el aumento de marzo en dos pagos, demorando parte del pago por tres meses, no es lo mismo dar un aumento del 30% en diciembre, que pagar el 2,2% por mes, aunque ambos terminan en el mismo valor en diciembre.
-Con el esquema gradual, partiendo de $100 se cobraría un total de $1.386 al año.
-Si el aumento se da solo el último mes, el jubilado cobraría durante once meses $100 y el $130 en diciembre, cobrando un total de $1.230.
Lo que hizo esta nueva fórmula es pagar menos durante los meses de marzo-abril-mayo y septiembre-octubre-noviembre.
Una alta inflación produce una pérdida mayor.
Por eso no es tan importante que el número que dé en diciembre sea igual o ligeramente inferior a la inflación sino que durante el transcurso del año se pagó menos que lo que resultaba del esquema anterior.
Este problema puede ser parcialmente corregido por un fallo de la Corte que tiene en estudio un expediente con sentencia favorable de la Sala III de la Cámara Federal de Seguridad Social, en el que se ordena a la ANSeS calcular el aumento de marzo del corriente año con el método anterior.
La expectativa para el próximo año.
Por supuesto que de reducirse la inflación, el año próximo los jubilados tendrán una movilidad mayor a la inflación por trasvasarse los altos aumentos de precios esperados para la segunda mitad de este año.
Notas técnicas.
Para el cálculo del valor de diciembre, contamos los datos de la inflación hasta junio y la evolución del RIPTE hasta mayo.
Entendemos que la devaluación -por la corrida cambiaria que ocurrió en mayo- no impactará fuertemente en la medición de los salarios del mes de junio por lo que estimamos el aumento en un 1,81% (RIPTE), lo que resulta en una movilidad de un 8,09% para el mes de diciembre y un total anual de 28,83%.
Aún si el Ministerio de Trabajo nos sorprendiera con un elevadísimo aumento del RIPTE en junio del 5%, la movilidad para este año terminaría en un 29,64%.
La movilidad de 2018 resulta en la medición de variables dados entre julio de 2017 y junio de 2018, por lo tanto, la suerte de los jubilados ya está echada.
La pérdida del poder adquisitivo de los jubilados en lo que va del año es del 3,86%.
La fórmula originaria del PEN hubiera dado hoy una movilidad del 29,65%, contra un 28,83% de la actual.
La fórmula anterior hubiera pagado mejores jubilaciones durante el año más allá de igualar los haberes a diciembre.
El director de la ANSeS aseguró que este año las jubilaciones estarían 4 puntos por encima de la inflación.
