
"El sinceramiento fiscal se pudo llevar adelante porque supimos alinearnos a una agenda global, particularmente de la OCDE y el G-20 que pusieron el tema sobre la mesa, más los agentes de los bancos internacionales que pidieron a sus clientes las debidas aclaraciones sobre el origen de los fondos depositados en las cuentas corrientes", señaló el titular de la AFIP.
Al respecto, añadió que desde el punto de vista local "mucha gente, con más de 50 años, hijos y nietos, decidió blanquear porque sentían que su patrimonio se estaba desarmando en el exterior".