Preparado para su debut en la Semana del Diseño de Milán del 12 al 17 de abril, el prototipo Setsuna desafía la noción de que los autos tienen que ser únicamente productos industriales cargados con la tecnología más moderna.
El deportivo descapotable Toyota Setsuna fue concebido para encarnar el afecto creciente que los propietarios sienten por sus vehículos, y para mostrar cómo éstos siguen cambiando y ofreciendo un nuevo valor cuando se los trata con cariño a lo largo del tiempo.
El ingeniero de Toyota, Kenji Tsuji y su equipo han transmitido esas ideas a través del diseño único del Setsuna.
La madera fue el material empleado para dar forma a este vehículo como modo de expresar la idea de que el amor crece con el paso del tiempo. El color y el tacto de la madera cambian a medida que se cuida. Responde directamente al cariño con que se trata. El Setsuna pasará una y otra vez de una generación a otra, y se transforma en un vehículo que pertenecerá únicamente a una familia. Los cambios físicos en el vehículo encarnan la naturaleza cambiante del vínculo con sus propietarios y representan los recuerdos del tiempo pasado juntos.
La aguja corta de la esfera de aluminio del indicador del tablero del Setsuna marca la hora del día- una vuelta son 24 horas-, mientras que la larga muestra el paso de los días- una vuelta son 365 días-. El contador con fondo negro y dígitos en blanco indica los años que pasan e indica el paso del tiempo a lo largo de la historia de una familia, mientras el Setsuna permanece a su lado. Aunque el vehículo se transmita a nuevas generaciones, el contador sigue girando, y adquiere así un valor ligado a los recuerdos de cada familia. Esos recuerdos puntuales se van acumulando con el tiempo, y hacen que el vehículo sea cada vez más esencial y un querido miembro de la familia por derecho propio.
La idea de “la acumulación de momentos” se ha expresado a través de un emblema circular radial. El diseño evoca un reloj que muestra cada momento concreto, al tiempo que da la impresión de un momento que se abre como una flor. Refleja la esperanza de que la familia y el vehículo sigan creciendo juntos, igual que los árboles crecen más altos y fuertes anillo a anillo.
Cuidadosa selección de la madera adecuada para cada sección
Para expresar plenamente la belleza de ciertas vetas de madera, se pueden intercambiar dos patrones distintos de cedro japonés para formar los paneles exteriores del Setsuna. Esos dos patrones son la veta recta, con el corte hacia el centro de los troncos, y el corte transversal, a la distancia adecuada del centro de los troncos. La veta recta da una impresión más formal, ya que se ven más nítidas y uniformes. Por el contrario, las vetas transversales son más suaves y más irregulares, con distintos tipos de líneas visibles en cada pieza de madera, lo que crea una impresión singular y amable.
Técnicas japonesas tradicionales de carpintería: okuriari y kusabi
Carrocería hecha de paneles de madera sustituibles
Barniz con paño
El objetivo era crear asientos confortables que dieran la impresión de poder envolver cómodamente a cualquiera, como un banco de madera en un parque. La madera de fatsia japónica de los asientos se ha barnizado y las partes que entran en mayor contacto con el cuerpo fueron cubiertas con cuero. El carácter y la profundidad de la madera, el barniz y el cuero en estos dos asientos evolucionan con el tiempo para envolver suavemente a todos los miembros de la familia.
Aluminio para dar contraste
Puesto que las piezas de madera se van cambiando con el tiempo, la línea de la carrocería adopta una curva más pronunciada y hermosa, como un barco. Al mirarse de frente, se puede ver la forma heptagonal, y al mirarse desde los laterales o desde arriba, la forma puede interpretarse como elíptica. A partir del exterior del vehículo que recuerda a un barco, es fácil imaginarse a una familia emprendiendo un viaje hasta el mar.
Un prototipo que redefine el concepto del vehículo
De hecho, el Setsuna puede circular. Sin embargo, no puede circular por vías públicas como un vehículo normal. Si bien se trata de un prototipo, esperamos poder transmitir la alegría que puede suponer conducirlo. Por eso, esperamos de verdad que llegue el día en que todo el mundo pueda probar la experiencia de conducirlo.
Kenji Tsuji, ingeniero responsable del desarrollo de Setsuna Concept
"Cuando creamos el Setsuna, imaginábamos a una familia volcando en él su cariño durante generaciones, de modo que el vehículo iría adquiriendo un valor insustituible. Puede ir desarrollándose de forma continua con los vínculos que se crean entre el vehículo y la familia, como los anillos que van creciendo en un árbol. Para desarrollarlo valiéndonos del carácter de la madera, hablamos directamente con expertos en una amplia variedad de campos, desde carpinteros especializados en la construcción de templos y santuarios hasta carpinteros de embarcaciones. Por otra parte, durante este proyecto, Sumitomo Forestry, una empresa que entiende a la perfección nuestra idea, compartió con nosotros sus conocimientos sobre construcción en madera, y juntos emprendimos varios proyectos de desarrollo conjunto desde las fases iniciales, incluido la selección de madera y propuestas de técnicas de procesamiento y métodos de ensamblaje. Con el uso de la madera como material principal, también invertimos muchísimo tiempo y pasión en el vehículo propiamente dicho con nuestros compañeros, creando un prototipo y evaluándolo para que el resultado ofreciera un funcionamiento básico en lo que se refiere al tacto y el confort de la conducción. Ahora, exponiendo el Setsuna, que ha sido creado con esas esperanzas en mente y recabando una amplia variedad de opiniones, creemos que podemos mejorar aún más el prototipo. Una de las reacciones que hemos recogido en particular ha sido la esperanza de que incorporemos este concepto en la fabricación de automóviles en el futuro".