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Los tiempos difíciles nos han hecho a todos un poco más cautelosos acerca vaciar nuestros bolsillos en un capricho. Cuando se trata de gastar con discreción, es importante tener claras nuestras prioridades sobre aquello en lo que pensamos que vale la pena gastar dinero. Aquí hay 11 cosas en las que definitivamente valen la pena invertir una buena suma de dinero.
Educación. Considera tu educación una inversión en ti mismo y tu carrera. Tomar clases que pueden mejorar tu sentido de la industria o hacerte pensar de manera diferente sobre el camino que ha elegido es digno de tu tiempo y dinero. Aun cuando hayas terminado con tus días de estudiante, siempre se puede seguir aprendiendo.
Seguros. Necesitamos un seguro para protegernos de pagar dinero extra si algo inesperado ocurre. Bien vale la pena pagar un seguro de auto y un seguro de gastos médicos. Sin embargo, ten en cuenta que no todas las pólizas de seguro son iguales: echa un vistazo detenido antes de contratar cualquiera.
Un buen traje. Tu capacidad para obtener ingresos es tu mayor activo. Necesitas un traje de excelente calidad para acudir a entrevistas de trabajo por dos razones básicas: lograrás una mejor impresión y te hará sentir más confianza, factores cruciales para tener una entrevista exitosa.
Un buen corte de pelo. No tienes que visitar el salón más elegante de la ciudad para conseguir un buen corte de pelo, pero gastar suficiente dinero en uno bueno pulirá tu apariencia y te ahorrará el tener que pagar aún más para arreglar un corte de cabello fallido.
Cultura. Paseos como visitar museos y monumentos sirven como entretenimiento y te dan una dosis de cultura. Es fácil quedar atrapado en tu propio pequeño mundo, pero observar los logros de otras personas puede abrirte los ojos.
Buenos zapatos. Ahorrar para un par de zapatos de calidad es una decisión inteligente. Van a durar por años, especialmente si los cuidas y les renuevas las suelas cuando sea necesario. Consigue un par que vaya con todo, y no tendrás que ir a la zapatería por un largo rato.
Ir al médico. El costo de un chequeo regular es nada comparado con el costo de las sorpresas inesperadas de salud. Manten tus citas médicas para evitar problemas en el futuro y así vivir la vida más saludable possible.
Tu bienestar físico. No necesitas inscribirte a un gimnasio para hacer ejercicio, pero si la única forma de empezar a moverte, inscríbete en un club local. El ejercicio reduce el estrés y te tonifica. Cuando estés de compras, elige una alimentación sana que mantendrá tu cuerpo trabajando lo mejor que pueda.
Mantenimiento del hogar. Ignorar un problema sólo empeora las cosas en el largo plazo. Cuando algo en tu casa necesita ser reparado, limpiado o mantenimiento, haz tu mejor esfuerzo para atenderlo tan pronto como sea posible.
Viajar. Vivir exclusivamente para el trabajo no es vivir, así que sal y conoce los lugares que te interesan. No hay precio que puedas poner a los recuerdos y experiencias especiales, pero tampoco te endeudes. Gasta y ahorra sabiamente, y vas a tener los medios para hacer tus viajes de ensueño realidad.
Visitar la familia y los amigos . Comprar boletos de avión o llenar el tanque de gas para visitar a amigos y familiares que viven lejos es una parte necesaria de la vida. Esas personas son una parte de ti, y el mantenimiento de esas relaciones es algo que no puedes darte el lujo de no hacer.
