El Grupo E.ON cerró el primer trimestre del ejercicio con un beneficio neto de 762 millones de euros, lo que supone un descenso del 65% con respecto al mismo periodo del año pasado, cuando ganó 2.166 millones.
El EBITDA se situó en los 3.160 millones de euros, frente a 3.200 millones esperados por el consenso de analistas.
El EBITDA se situó en los 3.160 millones de euros, frente a 3.200 millones esperados por el consenso de analistas.
La compañía mantiene su previsión para 2014, y todavía espera un EBITDA entre 8.000-8.600 millones de euros y un beneficio subyacente de entre 1.500-1.900 mlns euros.
Los títulos de E.On retroceden un 1,9%.