La agencia de calificación crediticia Standard & Poors (S&P) ha recortado en un escalón la calificación de la deuda soberana de Brasil, desde BBB a BBB- con perspectiva estable, situándola al borde del grado de especulación, también conocido como bono basura, debido al impacto negativo que tienen las medidas del Gobierno en las cuentas públicas y su credibilidad.