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Funcionarios de los ministerios de Economía y Planificación y ejecutivos de YPF avanzan en un plan para hacer un pago unilateral a Repsol por el 51 por ciento de las acciones expropiadas de la petrolera en abril del año pasado
Fuentes del Gobierno español confiaron al diario La Nación que la Argentina hizo saber que estaba en estudio un plan que consistiría en depositar una suma determinada a favor de Repsol.
Sin embargo, según esas fuentes, la respuesta fue terminante: "Se transmitió a los enviados de la Casa Rosada que ese movimiento sólo aumentaría la hostilidad y no frenaría los juicios internacionales que ya están en marcha".
De acuerdo al matutino, el Gobierno habría propuesto un pago por el equivalente 1.500 millones de dólares, en moneda local y al tipo de cambio oficial, en una cuenta del Banco Nación.
Tras la expropiación del 51 por ciento de las acciones que Repsol poseía en YPF, la compañía conducida por Antonio Brufau reclamó una compensación de 10.500 millones de dólares al iniciar el litigio ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones del Banco Mundial (CIADI).
Tras la ejecución de garantías de las acciones de Petersen Energía (del Grupo Petersen, de la familia Eskenazi) por falta de pago, la empresa española retiene un 12 por ciento del capital de la principal petrolera del país.
De acuerdo a la ley sancionada a fines de abril de 2012, el Tribunal de Tasaciones de la Nación es el encargado de establecer el precio de los activos expropiados a Repsol, organismo que comenzó a estudiar el caso el mes pasado y que podría emitir una conclusión a principios de octubre.
Según la ley 26.741, el Gobierno tiene 24 meses desde la nacionalización para determinar el precio de la petrolera. Hasta ahora pasaron poco más de 17 meses.
El viceministro de Economía, Axel Kicillof, considera que Repsol debería devolverle plata a la Argentina, ya que la acusa de la transferencia de activos de YPF a Repsol y de un giro de utilidades excesivo, entre otras cosas.
Por su parte, el presidente de la petrolera, Miguel Galuccio, quiere cerrar el capítulo de la expropiación, pues si bien es crítico de la gestión de la firma española, cree que la Argentina debe hacer un pago para que la petrolera resulte creíble para los inversores.
Coincide con Kicillof en que no está dispuesto a pagar ni un solo dólar más que la oferta que ya le hizo llegar a Brufau, confirmó un ejecutivo de diálogo permanente con el titular de YPF.
"La negociación llegó a un punto clave. No sé cómo se va a definir, pero algo va a pasar en los próximos días", habría indicado el ejecutivo a un colaborador directo.
Galuccio inició negociaciones el verano pasado a través de Isidro Fainé, presidente de Caixabank, el mayor accionista minoritario de Repsol, quien se reunió con la presidente Cristina Fernández de Kirchner el 25 de febrero pasado.
Además, en junio Galuccio vio a Emilio Lozoya, timonel de Pemex, dueña de 9,4 por ciento de Repsol, quien llevó una propuesta al directorio de la española, consistente en el pago de 1.500 millones de dólares más 47 por ciento en una nueva sociedad controlada por YPF para explotar concesiones en el yacimiento no convencional Vaca Muerta.
Tanto Lozoya como Fainé se mostraron a favor de un acuerdo con la Argentina, estando el primero dispuesto a abandonar Repsol si eso no ocurre. En la Casa Rosada creen que esa jugada es estratégica, completó la nota de La Nación.
Sin embargo, según esas fuentes, la respuesta fue terminante: "Se transmitió a los enviados de la Casa Rosada que ese movimiento sólo aumentaría la hostilidad y no frenaría los juicios internacionales que ya están en marcha".
De acuerdo al matutino, el Gobierno habría propuesto un pago por el equivalente 1.500 millones de dólares, en moneda local y al tipo de cambio oficial, en una cuenta del Banco Nación.
Tras la expropiación del 51 por ciento de las acciones que Repsol poseía en YPF, la compañía conducida por Antonio Brufau reclamó una compensación de 10.500 millones de dólares al iniciar el litigio ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones del Banco Mundial (CIADI).
Tras la ejecución de garantías de las acciones de Petersen Energía (del Grupo Petersen, de la familia Eskenazi) por falta de pago, la empresa española retiene un 12 por ciento del capital de la principal petrolera del país.
De acuerdo a la ley sancionada a fines de abril de 2012, el Tribunal de Tasaciones de la Nación es el encargado de establecer el precio de los activos expropiados a Repsol, organismo que comenzó a estudiar el caso el mes pasado y que podría emitir una conclusión a principios de octubre.
Según la ley 26.741, el Gobierno tiene 24 meses desde la nacionalización para determinar el precio de la petrolera. Hasta ahora pasaron poco más de 17 meses.
El viceministro de Economía, Axel Kicillof, considera que Repsol debería devolverle plata a la Argentina, ya que la acusa de la transferencia de activos de YPF a Repsol y de un giro de utilidades excesivo, entre otras cosas.
Por su parte, el presidente de la petrolera, Miguel Galuccio, quiere cerrar el capítulo de la expropiación, pues si bien es crítico de la gestión de la firma española, cree que la Argentina debe hacer un pago para que la petrolera resulte creíble para los inversores.
Coincide con Kicillof en que no está dispuesto a pagar ni un solo dólar más que la oferta que ya le hizo llegar a Brufau, confirmó un ejecutivo de diálogo permanente con el titular de YPF.
"La negociación llegó a un punto clave. No sé cómo se va a definir, pero algo va a pasar en los próximos días", habría indicado el ejecutivo a un colaborador directo.
Galuccio inició negociaciones el verano pasado a través de Isidro Fainé, presidente de Caixabank, el mayor accionista minoritario de Repsol, quien se reunió con la presidente Cristina Fernández de Kirchner el 25 de febrero pasado.
Además, en junio Galuccio vio a Emilio Lozoya, timonel de Pemex, dueña de 9,4 por ciento de Repsol, quien llevó una propuesta al directorio de la española, consistente en el pago de 1.500 millones de dólares más 47 por ciento en una nueva sociedad controlada por YPF para explotar concesiones en el yacimiento no convencional Vaca Muerta.
Tanto Lozoya como Fainé se mostraron a favor de un acuerdo con la Argentina, estando el primero dispuesto a abandonar Repsol si eso no ocurre. En la Casa Rosada creen que esa jugada es estratégica, completó la nota de La Nación.
