La Reserva Federal estadounidense (FED) ratificó esta tarde la continuidad de su programa de estímulo monetario por un volumen mensual de 85.000 millones de dólares, y dijo que esperará a contar con mayor evidencia sobre el ritmo de reactivación de la principal economía del mundo para reducir sus compras de bonos.
Conocida la decisión, los principales índices de Wall Street se afirmaron en terreno positivo y mientras el Dow Jones avanza 0,85 por ciento, el S&P 500 trepa 1,1 por ciento.
Al mismo tiempo, en Buenos Aires el índice Merval escala 1,75 por ciento y en san Pablo, el Bovespa gana 0,97 por ciento.
Tras su reunión de dos días terminada esta tarde, el Comité de Mercado Abierto de la FED consideró que si bien desde el año pasado disminuyeron los riesgos a la baja tanto para las perspectivas económicas como para el mercado laboral, advirtió que "el endurecimiento de las condiciones financieras de los últimos meses, si se mantiene, podría desacelerar el ritmo de mejora en la economía y el mercado de trabajo".
Entre los factores adversos, el organismo que conduce Ben Bernanke identificó los recortes al gasto público y las subas de las tasas hipotecarias.
También señaló la persistencia de la inflación por debajo de su objetivo de 2 por ciento anual "podría suponer un riesgo para el desempeño económico" de la principal potencia mundial, aunque reiteró que la inflación "se moverá hacia su objetivo a medio plazo".
En ese marco, el Comité (FOMC, por su sigla en inglés) optó por contar con más evidencia de que se mantendrá la reactivación antes de ajustar el ritmo mensual de sus compras de sus compras de títulos, 45.000 millones de dólares en valores del Tesoro estadounidense largo plazo y otros 40.000 millones en títulos respaldados por hipotecas.
Además, reiteró que espera mantener una "postura altamente acomodaticia" de la política monetaria "por lo menos" hasta que la tasa de desempleo permanezca por encima de 6,5 por ciento, y que la inflación no sobrepase en medio punto porcentual el objetivo de largo plazo de 2 por ciento.
También ratificó que para determinar cuánto tiempo se debe mantener esta "postura altamente acomodaticia" de la política monetaria, el FOMC tomará en cuenta otro tipo de información como indicadores de las condiciones del mercado laboral, de presiones inflacionarias, de expectativas de inflación y la evolución financiera.
"Cuando el Comité decida comenzar a retirar la política expansiva, se necesitará un enfoque equilibrado en consonancia con sus objetivos de largo plazo de máximo empleo y una inflación de 2 por ciento", volvió a escribirse en el comunicado del organismo.
En esta ocasión, uno de los diez miembros del Comité de Mercado Abierto de la FED votó en contra de la decisión mayoritaria. Esther George, titular del Banco de la Reserva Federal de Kansas, volvió a expresar su preocupación por los riesgos de futuros desequilibrios económicos y financieros debido al elevado nivel de flexibilidad monetaria.
La próxima reunión de la FED está agendada para los días 29 y 30 de octubre.
Se aguarda ahora la conferencia de prensa de Bernanke.
Al mismo tiempo, en Buenos Aires el índice Merval escala 1,75 por ciento y en san Pablo, el Bovespa gana 0,97 por ciento.
Tras su reunión de dos días terminada esta tarde, el Comité de Mercado Abierto de la FED consideró que si bien desde el año pasado disminuyeron los riesgos a la baja tanto para las perspectivas económicas como para el mercado laboral, advirtió que "el endurecimiento de las condiciones financieras de los últimos meses, si se mantiene, podría desacelerar el ritmo de mejora en la economía y el mercado de trabajo".
Entre los factores adversos, el organismo que conduce Ben Bernanke identificó los recortes al gasto público y las subas de las tasas hipotecarias.
También señaló la persistencia de la inflación por debajo de su objetivo de 2 por ciento anual "podría suponer un riesgo para el desempeño económico" de la principal potencia mundial, aunque reiteró que la inflación "se moverá hacia su objetivo a medio plazo".
En ese marco, el Comité (FOMC, por su sigla en inglés) optó por contar con más evidencia de que se mantendrá la reactivación antes de ajustar el ritmo mensual de sus compras de sus compras de títulos, 45.000 millones de dólares en valores del Tesoro estadounidense largo plazo y otros 40.000 millones en títulos respaldados por hipotecas.
Además, reiteró que espera mantener una "postura altamente acomodaticia" de la política monetaria "por lo menos" hasta que la tasa de desempleo permanezca por encima de 6,5 por ciento, y que la inflación no sobrepase en medio punto porcentual el objetivo de largo plazo de 2 por ciento.
También ratificó que para determinar cuánto tiempo se debe mantener esta "postura altamente acomodaticia" de la política monetaria, el FOMC tomará en cuenta otro tipo de información como indicadores de las condiciones del mercado laboral, de presiones inflacionarias, de expectativas de inflación y la evolución financiera.
"Cuando el Comité decida comenzar a retirar la política expansiva, se necesitará un enfoque equilibrado en consonancia con sus objetivos de largo plazo de máximo empleo y una inflación de 2 por ciento", volvió a escribirse en el comunicado del organismo.
En esta ocasión, uno de los diez miembros del Comité de Mercado Abierto de la FED votó en contra de la decisión mayoritaria. Esther George, titular del Banco de la Reserva Federal de Kansas, volvió a expresar su preocupación por los riesgos de futuros desequilibrios económicos y financieros debido al elevado nivel de flexibilidad monetaria.
La próxima reunión de la FED está agendada para los días 29 y 30 de octubre.
Se aguarda ahora la conferencia de prensa de Bernanke.
nosis