Kutxabank ha cerrado hoy, en menos de una hora y con una demanda cinco veces superior, la colocación entre inversores institucionales extranjeros su primera emisión de cédulas hipotecarias, por un total de 750 millones de euros. Según ha informado en una nota el banco vasco, fruto de la fusión de las cajas BBK, Kutxa y Vital, el plazo de amortización de las cédulas es de cuatro años y su rendimiento es de 220 puntos básicos sobre el mid-swaps, el indicador que fija la media de los seguros de cobertura para emisiones de este tipo.