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Un riesgo excesivo suponen las cuentas de argentinos y venezolanos para JP Morgan Chase, y en especial cuando, en el caso de la Argentina, la Afip y la UIF preparan una nueva embestida para identificar y controlar a los inversionistas argentinos en el exterior, imitando a decisiones que ya implementó hace tiempo Venezuela. Por lo tanto JP Morgan ha decidido que el riesgo es permanente y elevado, respecto de la recompensa. No más argentinos ni venezolanos, y la fecha tope para cerrar sus cuentas es el último día hábil de marzo, 29/03, afirman ejecutivos que pasaron por Punta del Este, Uruguay.
Urgente24). JP Morgan estuvo mucho en las noticias argentinas desde 2008 a la fecha: un ejecutivo suyo, Hernán Arbizu, le robó US$ 2,8 millones a un ahorrista y para no ir preso en USA, decidió revelar al Gobierno argentino una supuesta nómina de clientes locales de JP Morgan, solicitando que no se lo extraditara.
El allanamiento del juez federal Sergio Torres a la oficina de JP Morgan derivó en 40 cajas de documentación confidencial secuestrada, origen de otras causas adicionales, un desastre para la institucion bancaria estadounidense fusionada con Chase Manhattan Bank en el año 2000
Entre los ahorristas identificados había algunos accionistas de Grupo Clarín, y la Administración Cristina le concedió la protección local, mientras paseaba al prófugo por los medios de comunicación estatales y paraestatales.
Desde entonces, periódica e insistemente, JP Morgan soporta inspecciones diversas en sus oficinas, resultando muy complicada su operatoria argentina, tal como también le sucede, por otros motivos, con la de ahorristas venezolanos.
Luego, ya se ha 'filtrado' que el Ejecutivo Nacional argentino, luego de la feria judicial, intentará que el juez federal Torres le conceda nueva vitalidad a la investigación que involucra a JP Morgan, considerando que Arbizu se había quejado que desde que le tomaron declaración testimonial, no volvió a enterarse de alguna novedad en la causa, y eso ocurrió hace algunos meses.
Otra noticia que llegó es que la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) preparan una nueva embestida contra ahorristas argentinos en el exterior. Es más: con tal de 'atrapar' a los argentinos en el exterior, hay funcionarios argentinos aconsejando firmar con el gobierno de USA el tratado de intercambio informativo conocido como Fatca (Foreign Account Tax Compliance Act), tal como México hizo en noviembre de 2012 y se encuentra vigente desde enero de 2013.
En definitiva, tener clientes argentinos es una complicación, igual que venezolanos. Economías 'en negro', y causas judiciales que inevitablemente son politizadas por las administraciones gubernamentales. Y con tanto costo que generan, la rentabilidad es nula.
En ese contexto, fuentes locales e internacionales presentes en Punta del Este -donde en casa del banquero Jorge Macri ocurrió un encuentro social relevante- confirmaron que JP Morgan ha decidido que el riesgo es permanente y elevado, respecto de la recompensa. No más argentinos ni venezolanos, y la fecha tope para cerrar sus cuentas es el último día hábil de marzo, 29/03, afirman ejecutivos que pasaron por Punta del Este, Uruguay.
JP Morgan, mediante acuerdos con casas de corretaje locales (habitualmente denominados"introducing brokers"), ofrecía servicios de custodia y manejo de fondos a los llamados "high-net-worth individual" o clientes de recursos económicos altos.
Entre alguna gente de bancos hay interrogantes acerca de quién, finalmente, atenderá a los clientes forzados a cambiar de entidad.
Por ejemplo, en igual o mayor escala, otro banco que presta servicios de banca privada bajo la misma modalidad que JP Morgan en la Argentina, es decir mediante la contratación de los"introducing brokers" locales registrados o no registrados con la Comisión Nacional de Valores, esPershing LLC, una subsidiaria del Bank of New York Mellon.
Esta institución, que es competidorr directo de JP Morgan, aún no se ha pronunciado acerca de si continuará o no brindando período servicios a ciudadanos argentinos.
