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Si usted fuera griego y tuviera una cuenta en Suiza, las Islas Caimán, o cualquier otro paraíso fiscal, probablemente sentiría pánico a la hora de abrir el buzón de su casa.
Ministerio de Economía griego comenzará el viernes su plan de acción contra los miles de griegos con depósitos en paraísos fiscales, sospechosos de no haber declarado ese dinero y estar evadiendo impuestos: enviará alrededor de 15.000 cartas a aquellos ciudadanos susceptibles de haber mandado dinero al extranjero sin haberlo comunicado antes a la hacienda pública.
Según las autoridades, el dinero sacado del país por esas personas supera los 5.000 millones de euros, una cifra importantísima si se tiene en cuenta que la semana pasada se aprobaron medidas de austeridad en el país por 13.500 millones de euros después de una llamada al ahorro y la austeridad por parte de los acreedores de Grecia. Las autoridades esperan recaudar unos 2.250 millones de euros después de tasar con impuestos el dinero sacado del país por los 15.000 investigados.
Todos ellos deberán remitir al ministerio de Economía una declaración de activos y propiedades a las tres semanas de recibir la carta gubernamental. Tendrán que demostrar con pruebas documentales que el dinero sacado del país había sido correctamente declarado en la oficina de impuestos. De lo contrario, serán obligados a pasar por el fisco.
Las 15.000 personas objeto de la investigación son tan sólo una parte de los alrededor de 54.000 griegos con cuentas en el extranjero, según la información en posesión del gobierno.
Lenta investigación de la lista Lagarde
Otro documento, la controvertida 'Lista Lagarde' con los nombres de unos 2.000 griegos con 1.950 millones de euros de euros en depósitos en la rama suiza del HSBC, está siendo investigada por la policía financiera helena (SDOE) aunque el proceso está siendo lento.
Se espera que la fiscalía reciba esta semana la versión original de los datos y decida próximamente los cargos a imputarse sobre los nombres de la lista. Entre ellos podrían estar tres ex ministros –uno de ellos se suicidó el mes pasado-, el presidente del parlamento y numerosos empresarios.
Varios cargos políticos y policiales podrían ser llamados a declarar ante una comisión parlamentaria en las próximas semanas debido al extravío por más de dos años del documento. Los ex ministros de Economía Giorgos Papaconstantinou y Evagelos Venizelos, actual líder de los socialistas griegos, podrían ser procesados por falta de transparencia y por no haber entregado la lista a la policía financiera.
La 'Lista Lagarde' fue filtrada en 2010 al gobierno griego por Christine Lagarde, la entonces ministra gala de Economía y actualmente directora del Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin embargo, la información se perdió hasta que el pasado octubre Evagelos Venizelos, líder de los socialistas griegos (Pasok) entregó el documento al gobierno contenido en un 'pen drive'.
Grandes propiedades en el extranjero
La evasión fiscal es uno de los mayores problemas de la Grecia contemporánea. Diversos estudios publicados en los últimos años calculan que los griegos más pudientes y algunas empresas podrían tener fuera del país activos en depósitos o propiedades muy superiores al menguante PIB griego, aunque conocer la cifra exacta es una quimera. La mayoría de ese dinero no ha sido declarado, causando año tras año un gran agujero en las arcas públicas.
La crisis no ha hecho sino agudizar la evasión de dinero al extranjero: los helenos más pudientes han sacado sus euros del país por miedo a una vuelta al dracma. La nueva moneda se devaluaría en pocas semanas, menguando sus fortunas. En febrero del 2012, el ministerio de economía estimó que los griegos habían enviado unos 16.000 millones de euros al extranjero desde el comienzo de la crisis.
Grecia ha adolecido tradicionalmente una gran economía sumergida. La Unión Europea estimó en 2011 que el Estado tenía pendiente recolectar unos 60.000 millones de euros en impuestos no cobrados. Sólo se espera recoger unos 8.000 millones, debido a la imposibilidad de rastrear el resto de los impagos.
El primer ministro Antonis Samaras prometió tras ganar las elecciones el pasado junio una amnistía para todo aquel que declarase su dinero en el extranjero.
Podría mirar para otro lado, siempre y cuando los fondos estuvieran disponibles para ser cargados con impuestos. Además, ha intentado cerrar un acuerdo bilateral con Suiza para tener acceso a los nombres de los griegos con cuentas en ese país.
Según las autoridades, el dinero sacado del país por esas personas supera los 5.000 millones de euros, una cifra importantísima si se tiene en cuenta que la semana pasada se aprobaron medidas de austeridad en el país por 13.500 millones de euros después de una llamada al ahorro y la austeridad por parte de los acreedores de Grecia. Las autoridades esperan recaudar unos 2.250 millones de euros después de tasar con impuestos el dinero sacado del país por los 15.000 investigados.
Todos ellos deberán remitir al ministerio de Economía una declaración de activos y propiedades a las tres semanas de recibir la carta gubernamental. Tendrán que demostrar con pruebas documentales que el dinero sacado del país había sido correctamente declarado en la oficina de impuestos. De lo contrario, serán obligados a pasar por el fisco.
Las 15.000 personas objeto de la investigación son tan sólo una parte de los alrededor de 54.000 griegos con cuentas en el extranjero, según la información en posesión del gobierno.
Lenta investigación de la lista Lagarde
Otro documento, la controvertida 'Lista Lagarde' con los nombres de unos 2.000 griegos con 1.950 millones de euros de euros en depósitos en la rama suiza del HSBC, está siendo investigada por la policía financiera helena (SDOE) aunque el proceso está siendo lento.
Se espera que la fiscalía reciba esta semana la versión original de los datos y decida próximamente los cargos a imputarse sobre los nombres de la lista. Entre ellos podrían estar tres ex ministros –uno de ellos se suicidó el mes pasado-, el presidente del parlamento y numerosos empresarios.
Varios cargos políticos y policiales podrían ser llamados a declarar ante una comisión parlamentaria en las próximas semanas debido al extravío por más de dos años del documento. Los ex ministros de Economía Giorgos Papaconstantinou y Evagelos Venizelos, actual líder de los socialistas griegos, podrían ser procesados por falta de transparencia y por no haber entregado la lista a la policía financiera.
La 'Lista Lagarde' fue filtrada en 2010 al gobierno griego por Christine Lagarde, la entonces ministra gala de Economía y actualmente directora del Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin embargo, la información se perdió hasta que el pasado octubre Evagelos Venizelos, líder de los socialistas griegos (Pasok) entregó el documento al gobierno contenido en un 'pen drive'.
Grandes propiedades en el extranjero
La evasión fiscal es uno de los mayores problemas de la Grecia contemporánea. Diversos estudios publicados en los últimos años calculan que los griegos más pudientes y algunas empresas podrían tener fuera del país activos en depósitos o propiedades muy superiores al menguante PIB griego, aunque conocer la cifra exacta es una quimera. La mayoría de ese dinero no ha sido declarado, causando año tras año un gran agujero en las arcas públicas.
La crisis no ha hecho sino agudizar la evasión de dinero al extranjero: los helenos más pudientes han sacado sus euros del país por miedo a una vuelta al dracma. La nueva moneda se devaluaría en pocas semanas, menguando sus fortunas. En febrero del 2012, el ministerio de economía estimó que los griegos habían enviado unos 16.000 millones de euros al extranjero desde el comienzo de la crisis.
Grecia ha adolecido tradicionalmente una gran economía sumergida. La Unión Europea estimó en 2011 que el Estado tenía pendiente recolectar unos 60.000 millones de euros en impuestos no cobrados. Sólo se espera recoger unos 8.000 millones, debido a la imposibilidad de rastrear el resto de los impagos.
El primer ministro Antonis Samaras prometió tras ganar las elecciones el pasado junio una amnistía para todo aquel que declarase su dinero en el extranjero.
Podría mirar para otro lado, siempre y cuando los fondos estuvieran disponibles para ser cargados con impuestos. Además, ha intentado cerrar un acuerdo bilateral con Suiza para tener acceso a los nombres de los griegos con cuentas en ese país.
