El gigante tecnológico Microsoft cerró hoy su año fiscal con una caída del beneficio del 26 por ciento pese al aumento de los ingresos y mientras se prepara para potenciar los dispositivos móviles y la transición a la computación en la nube. En el trimestre de abril a junio, que cierra el año fiscal de Microsoft, la compañía de Seattle cerró con su primera pérdida neta desde que comenzó a cotizar en el mercado de valores en 1986, por valor de 492 millones de dólares. Gran parte de este resultado negativo se debe a que sustrajo una cantidad importante del gasto diferido por la compra en 2007 de la agencia de publicidad online aQuantive por valor de 6.300 millones de dólares.