EnBuenasManos
es un emprendimiento social de personas no videntes capacitadas en masoterapia
que realizan masajes express en empresas, colaborando con los departamentos de
RRHH en mejorar la salud y el bienestar de los empleados.
“Hemos
logrado convertir una discapacidad física en una ventaja competitiva, ya que
los masajistas a lo largo de los años han desarrollado una sensibilidad táctil
superior al resto de nosotros”. Explica Hernan Español, coordinador de
EnBuenasManos.
El
objetivo del emprendimiento es contribuir en la inserción de personas no
videntes al mercado laboral, mejorando de esta forma su calidad de vida,
independencia e integración social.
El masaje
descontracturante se realiza sobre una silla ergonómica en las áreas de mayor
dolencia en personas que trabajan frente a la computadora (cuello, hombros y
espalda). Se le llama masaje express ya que se realiza en la misma empresa,
dura 15 minutos por turno y el empleado permanece vestido durante la sesión. Se
utilizan aromas y música para que la persona logre un estado pleno de
relajación.
“EnBuenasManos
nos ha permitido trabajar de masajistas ya que pese a que habíamos recibido
capacitación del Ministerio de Trabajo y de otras organizaciones nos era
imposible conseguir trabajo debido al prejuicio de contratarnos”. Explica
Javier Suñe, masajista del emprendimiento.
Con
solo 2 meses desde su lanzamiento 7 empresas ya han contratado el servicio
dando trabajo a 8 masajistas, el objetivo es dar trabajo sustentable a 50
masajistas para fines del 2012.