Royal Dutch Shell tiene problemas para saldar una suma de hasta 1.000 millones de dólares que debe a Irán por el petróleo crudo, ya que las sanciones financieras impuestas por la Unión Europea y Estados Unidos sobre el Estado islámico hacen casi imposible procesar los pagos, según fuentes de la industria. Cuatro fuentes afirmaron que la gigantesca petrolera le debe una elevada cifra a National Iranian Oil Co (NIOC) por las entregas de petróleo crudo, y una de ellas apuntó a una cantidad cercana a los 1.000 millones de dólares (unos 1.300 millones de euros). Una deuda de ese tamaño equivale a casi cuatro cargas de los tanqueros más grandes de crudo iraní o unos ocho millones de barriles.