Los países de la eurozona sopesan activar en la cumbre que celebrarán el miércoles los nuevos poderes preventivos del fondo de rescate de 440.000 millones de euros para estabilizar a Italia y ayudarle a hacer frente a sus crecientes costes de financiación, según publica este martes el diario francés "Le Monde". Se trataría de que el fondo de rescate empezara lo antes posible a comprar bonos italianos en el mercado primario y secundario, completando la tarea que ya realiza el Banco Central Europeo (BCE), o incluso de dar una línea de crédito preventiva a Roma similar a las que ya concede el Fondo Monetario Internacional.