Un equipo de expertos de la Unión Europea (UE), del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Central Europeo (BCE) inicia hoy en Atenas una inspección de un nuevo paquete de medidas que deberán aportar a las arcas estatales 76.000 millones de euros hasta 2015. Según fuentes del Ministerio griego de Finanzas, la misión tiene previsto reunirse durante los próximos días con autoridades gubernamentales, financieras y bancarias antes de que los jefes del equipo, que se espera lleguen la próxima semana a la capital helena, elaboren un informe. Esta revisión de la situación es considerada crucial por los analistas financieros, y coincide con los persistentes rumores de que Grecia no tendrá más remedio que reestructurar en breve su enorme deuda soberana.