El Gobierno de Japón revisó hoy a la baja, por primera vez en el último medio año, su valoración de la economía del país por las consecuencias del terremoto y tsunami del 11 de marzo, aunque indicó que el efecto podría ser solo a corto plazo. En su informe económico mensual, el Ejecutivo nipón subrayó que el desastre tuvo efectos negativos tanto en las exportaciones como en la producción y el consumo. El Gobierno japonés estima que los daños en viviendas, infraestructuras e instalaciones industriales en el noreste del país podrían ascender a 25 billones de yenes (unos 204.000 millones de euros) y reducir el crecimiento económico en un 0,5% este año fiscal.