Estados Unidos autorizó hoy el primer permiso para perforar un nuevo pozo petrolero en el Golfo de México, tras el desastre ecológico producido por la explosión de un pozo de la firma BP que liberó al mar 4,9 millones de barriles en abril de 2010. La Oficina de Gestión y Regulación de Energía del Océano de EE.UU (BOEMRE, por su sigla en inglés) informó a través de un comunicado que autorizó a la empresa Shell Offshore a comenzar las operaciones de perforación en el Bloque Garden Banks 427, a 900 metros de profundidad. El pozo se encuentra a 220 kilómetros al sur de las costas de Luisiana.