Boudou: no hay recetas únicas sino políticas individuales coordinadas

Mientras participaba de la cumbre del G-20 ya concluida en Corea del Sur el ministro de Economía, Amado Boudou, destacó que además de analizarse la salida de la crisis internacional se planteó la necesidad de que los países dejen de ser clientes unos de otros y que comiencen a tratarse como socios.El ministro confirmó que durante su intervención en las reuniones del G-20 la presidente Cristina Fernández planteó que los países dejen de ser ya "clientes" para convertirse en "socios".Boudou informó que el documento elaborado como parte de las conclusiones del G-20 "muestra un mundo que está saliendo de la crisis. Pero deja clara también la agenda para el año que viene, que hay temas para tratar y resolver en conjunto".Según expresó, otra de las cuestiones que planteó la Presidenta fue que "más allá que se esté saliendo de la crisis, no es momento para que las necesidades individuales de cada país nos hagan perder de vista la salida, que tiene que ser del conjunto, que tenemos que vernos como socios y no como clientes"."La salida de la crisis demuestra la importancia de un espacio como el G-20 que invita a un trabajo en común, viendo las necesidades de cada uno, sin perder de vista que distintos países, con distintos problemas, con distintos tamaños, necesitan soluciones adecuadas para cada uno de ellos. No es lo mismo los países que tienen superávit comercial que los que tienen déficit comercial", explicó Boudou, afirmando que "ha quedado nuevamente bien en claro en el G-20 que ya no hay recetas únicas como era en la época del Consenso de Washington en los '90, sino que el conjunto de las naciones tienen que ir encontrando acciones políticas individuales pero coordinadas".El funcionario comentó que los presidentes que participaron de la Cumbre se mostraron preocupados en mantener los puestos de empleo y obras de infraestructura para fortalecer mercados internos.

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