Agradezco en nombre de quienes somos parte de Fiat en la Argentina que nos estén acompañando en esta jornada, importante por la cantidad de novedades que se les ha comunicado.Estoy seguro que esta renovación de la gama producto será bien recibida por el mercado argentino y, además, considero que será una importante contribución al proceso de mejora de la reputación de la marca y sus productos en el país, porque ciertamente estamos verificando que, paso a paso, estamos escalando posiciones en términos de imagen: Un indicador de que estamos logrando satisfacer las expectativas de los clientes de la marca y superando viejos prejuicios.Yo sé que están ansiosos –aunque la palabra me parece excesiva- de probar los autos en la pista, de confirmar que los nuevos motores E.torQ 1.6 son superiores en prestaciones y consumos a los 1.8 que dejamos atrás y de observar en detalle las líneas del Nuevo Idea y la configuración del Strada Doble Cabina. Pero me parece oportuno cerrar esta presentación con algunas observaciones más generales sobre la empresa y el escenario actual.Bien saben que desde que superamos la crisis, la prioridad de Fiat Auto fue la de consolidar sus operaciones en la Argentina, privilegiando los resultados de la compañía por encima del comprar en forma onerosa y contraproducente cuota de mercado; privilegiando una utilización pautada y sostenida en el tiempo de la capacidad instalada de nuestra planta en Córdoba; trabajando de manera integral y, paso a paso, en la mejora continua de los estándares de calidad, tanto en la fase industrial como el terreno comercial y de la post-venta, y también en el fortalecimiento de la imagen de la marca, a partir de sus productos y servicios.
Entendemos que esta estrategia está dando sus frutos. Prueba de ello es la obtención, por segundo año consecutivo, del Premio Fortuna a la Mejor Empresa Automotriz 2009, galardón que sustenta esencialmente en la evaluación de los estados contables y de resultados.Pero también hay otros indicios de que estamos recorriendo el camino acertado. La calidad de los productos que fabricamos en Córdoba no entra discusión, lo cual nos ha permitido destinar más del 80% de la producción al mercado brasileño y con volúmenes crecientes respecto a 2009.
Además, cuando buena parte de la competencia está cuidando su participación de mercado resignando valor de sus productos, Fiat está logrando que los clientes reconozcan, a pesar de competir en los segmentos más permeables al factor precios, los atributos de sus productos y de la marca.Comenzamos este último cuatrimestre del año con novedades que gravitarán en la oferta de la marca al mercado argentino. Las de hoy son un primer step, pero en breve arribarán otras novedades que, estoy seguro, serán del agrado del mercado, acrecentando las alternativas que Fiat ofrece en el país.Estamos, por cierto, trabajando muy duro con el desarrollo de nuevos y tradicionales proveedores para consolidar una cadena de valor eficiente y competitiva para afrontar nuevos desafíos.En ese orden, es absolutamente correcto y justo elogiar varias de las iniciativas en curso del Gobierno Nacional –y también del gobierno de Córdoba- para alentar y acompañar el desarrollo de un parque autopartista a la altura de las circunstancias. Es una materia en la que no sólo se han preocupado las áreas competentes del Ministerio de Industria y Turismo, y de otros organismos del Estado, sino que también la máxima autoridad del Gobierno, la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, se ha involucrado abiertamente en la definición de políticas activas para configurar un complejo automotor sustentable en el tiempo y de continuar operando como uno de los sectores que empujen el crecimiento económico, el empleo en blanco y el desarrollo profesional de quienes son parte de los diversos eslabones de esta cadena productiva.
Al estilo argentino –bien latino, por cierto-, con el calendario electoral por delante, hay ruidos y turbulencias que distorsionan una visión más clara del mediano y largo plazo, particularmente para quienes somos jugadores globales y operamos en sectores que necesitan proyecciones de muy largo aliento.En ese orden, sin embargo, están dadas las condiciones para que la Argentina aproveche las oportunidades que se perfilan para un mundo demandante de lo que genera el complejo agroindustrial argentino y que por las perspectivas de crecimiento de la región también hacen prever un crecimiento sostenido de las ventas de autos y vehículos comerciales. De allí que las previsiones de una industria automotriz argentina camino al millón de unidades producidas no sea una utopía.Por su tamaño y población, gravita el crecimiento sostenido de la economía brasileña que, por otra parte, implica incorporación de nuevos actores al mercado.Tampoco es menor la favorable evolución del mercado automotor argentino que, luego de la retracción debida a la crisis financiera internacional, viene verificando niveles de demanda incrementales, con una suba de más del 22% en el acumulado del año en lo que respecta a ventas a clientes finales.En síntesis, estamos frente a un panorama alentador y que podremos optimizar en la medida que actuemos con responsabilidad y criterios razonables.
La industria automotriz argentina tiene márgenes para ampliar los volúmenes de producción y colaborar a atender la demanda doméstica, regional e, inclusive, de mercados maduros, siempre que no pierda de vista la necesidad de cuidar el factor competitividad, que deriva de saltos de productividad o de la alteración de otras variables macro relevantes.No podemos perder de vista que obligadamente la estructura de costos en Brasil es una referencia ineludible, no sólo porque tiene economías de escala naturales, sino que tras años de crecimiento sostenido y políticas de largo aliento, ha logrado forjar un complejo industrial automotriz de peso a nivel global.La Argentina podrá jugar un papel no menor, no sólo por su condición de socio privilegiado de Brasil, sino porque dispone de capacidad instalada para aprovechar y competencias profesionales acordes con el arte de la industria automotriz actual.Obviamente, tenemos desafíos por delante, pero también oportunidades para no dejar pasar. Y Fiat, en este contexto, aspira no ser un observador pasivo, sino un jugador activo para gravitar con trabajo, producción y oferta de productos y servicios. En definitiva, materia en la que somos competentes.
Muchísimas gracias
NUEVA FIAT IDEA : Palabras de Cristiano Rattazzi
septiembre 06, 2010