La compañía farmacéutica suiza Roche Holding AG y Biogen Idec suspendieron el tratamiento con ocrelizumab en pacientes con artritis reumatoide y lupus luego de que su uso provocó muertes, poniendo en duda el futuro del fármaco. Roche y Biogen abandonaron el uso del fármaco experimental para las dos enfermedades luego de que una junta de observadores de seguridad comprobó infecciones graves en estudios que involucraron al producto y confirmó que algunas fueron fatales.