Jeremy Corbyn se lanza con ímpetu a disputar el voto en las zonas menos urbanizadas de Reino Unido. A falta de 27 días para las elecciones generales, el candidato del Partido Laborista prometió eliminar en todo el país el coste del acceso a la banda ancha, que asciende a las 30 libras (35 euros) por mes. El plan de Corbyn requerirá de una inversión de 20.000 millones de libras (23.000 millones de euros) al nacionalizar una parte de British Telecom (BT), el gigante de las telecomunicaciones en Reino Unido.
La propuesta del líder laborista requerirá de una mejora sustancial en la infraestructura de internet, según afirma Reuters, y será costeada con la subida de impuestos a las grandes empresas tecnológicas como Google, Amazon y Facebook.
"Es hora de hacer que la banda ancha de fibra completa más rápida sea gratuita para todos, en todos los hogares en todos los rincones del país", afirmó Corbyn, de 70 años, y líder del partido desde 2015.
"Al implementar la banda ancha como un servicio público, lideraremos al mundo en lo que respecta a la inversión pública para transformar nuestro país, reducir los impuestos que pagan los ciudadanos, impulsar nuestra economía y mejorar la calidad de vida de las personas", sostuvo el líder laborista.
BT, que fue fundada en 1846 como una empresa de telégrafos, desarrolló el sistema de telecomunicaciones de Reino Unido y fue una empresa pública hasta 1984 cuando fue privatizada por el Gobierno conservador de Margaret Thatcher. La empresa reacciona de manera negativa al anuncio de Corbyn y cae más de un 2% en la Bolsa de Londres este viernes.
Un plan rupturista
Los anuncios de Jeremy Corbyn no son nuevos. El líder laborista insistió en medidas similares en las campañas de las pasadas elecciones generales de junio de 2017 en unos comicios en los que quedó a menos del 3% de votos del Partido Conservador, liderado entonces por la exprimera ministra Theresa May. Corbyn, además, insiste en nacionalizar las empresas ferroviarias y de servicios públicos, además de aumentar los impuestos a las grandes fortunas y al sistema financiero.
Sin embargo, la intención de implementar internet gratis para todos no solo lo propone Corbyn. Su rival y favorito para las elecciones del próximo jueves 12 de diciembre, el primer ministro conservador Boris Johnson, también lleva en su programa la implementación gratuita de banda ancha, aunque recién a partir de 2025.
El consejero delegado de BT, Philip Jansen, por su parte, definió la intención de ambas formaciones políticas como "muy ambiciosas" y "extremandamente difícil de llevarlas a cabo.
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