Royal Bank of Scotland (RBS), entidad en la que el Gobierno británico controla
un 81% del capital, ha logrado un beneficio neto atribuido de 2.321
millones de libras (2.953 millones de euros) en los nueve primeros meses
del año, frente a las pérdidas de 293 millones de libras (373 millones de euros) en el mismo periodo de 2013, informó la entidad.