Daniel Lipovetzky, legislador porteño y vicepresidente electo del Colegio Público de Abogados, se mostró “no sólo conforme sino también muy feliz” por el fallo de la Cámara Federal que declara inconstitucional el acuerdo que el gobierno argentino celebrase con su par iraní, para investigar juntos el atentado a la mutual AMIA.
El dirigente fue el primero en presentar una acción de inconstitucionalidad el 8 de marzo de 2013. Lo hizo ante la Corte Suprema de Justicia, la que aceptó la legitimación de Lipovetzky, pero declinó su competencia a primera instancia, con el argumento de que ese Alto Tribunal no tenía competencia originaria. En ese aspecto el cuerpo siguió lo indicado por la Procuradora Alejandra Gils Carbó.
No obstante, el 15 de mayo de 2013, AMIA y DAIA hicieron su presentación. “Decidí entonces no avanzar con la iniciada por mí, para no generar confusiones, y habida cuenta de la evidente legitimidad que las dos entidades poseen para reclamar los las víctimas. Respeto enormemente tanto a AMIA como a DAIA, mi presentación obedecía a que no era posible saber el rumbo que tomarían las entidades y alguien debía poner freno urgente a semejante aberración. Una vez que tomaron cartas en el asunto, el tema debía quedar en sus manos”; expreso Lipovetzky.
De todas formas, el diputado resaltó que “el llamado “Memorandum de Entendimiento con Irán” viola abiertamente el principio de juez natural establecido en el artículo 18 de la Constitución, así como la prohibición al Poder Ejecutivo de ejercer funciones Judiciales que contiene el artículo 109 de nuestra Carta Magna” y concluyó diciendo que “esta sentencia refuerza la confianza en la Justicia y la esperanza de que nuestro país puede alcanzar una reconstrucción de las instituciones que tan dañadas han sido estos diez años”.