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La Cámara de Industriales Fundidores de la República Argentina (CIFRA), el Grupo de Productores Autopartistas (PROA) y la Cámara del Forjado (CAFOR), las tres cámaras que nuclean casi a la totalidad de los autopartistas metalmecánicos, entregaron el jueves último a la autoridades nacionales un informe que consigna que actualmente para la fabricación de vehículos nacionales un 70% del valor total de las autopartes es importado, realidad que continúa produciendo un descontrolado déficit de la balanza comercial.
La propuesta del sector en su conjunto es aumentar gradualmente durante dos años el contenido de autopartes locales en la fabricación de productos automotores hasta llegar a un mínimo del 33% netas de importaciones, es decir, nocontabilizando en este porcentaje en contenido importado de cada autoparte que se fabrique en el país. Además, el trabajo hace especial hincapié en crear un nuevo espacio para materializar mayores exportaciones de autopartes, como así también, efectuar cambios de consideración sobre importaciones de autopartes para el mercado de reposición.
“Es fundamental una nueva política de Estado sobre este tema a fin de sentar las bases para la recuperación del sector autopartista argentino. Hemos visto cómo nuestra industria se ha reducido debido a la agresiva oferta externa y falta de regulación oficial que, sumado a la falta de competitividad local, fue generando una situación que gradualmente desplazó a gran parte de las firmas autopartistas nacionales. Es hora de que la Argentina reaccione y defienda su industria y su empleo. El récord de venta de automóviles debería ir acompañado por el auge del sector autopartista y esto no sucede actualmente, a tal punto, que tenemos el nivel de integración más bajo de la historia Automotriz local. El contenido y espíritu del documento, conforma un aporte técnico concreto para revertir esta situación en un corto plazo”, dijeron los presidentes de CIFRA, Daniel Ferreyra y de PROA, Julio Cordero, y de CAFOR, Pedro Neiling.
De esta forma, los autopartistas plantean una solución posible y sustentable que establece reglas claras a importante una industria que ha sido muy castigada a lo largo de los últimos 20 años. Pero no sólo serían buenas noticias para los industriales involucrados, sino que ello generará mayor empleo y menor déficit comercial en el sector autopartes, que actualmente llega a los 9000 millones de dólares anuales.
La propuesta presentada tiene como referentes a países productores como lo son Brasil y México, donde los porcentajes de fabricación de piezas locales son similares o mayores al planteado por las tres entidades. En esos países las terminales automotrices han sido un actor fundamental en estos procesos a la hora de colaborar con los autopartistas para lograr el abastecimiento local.
El documento técnico de CIFRA, PROA y CAFOR consigna que la industria autopartista local ha sido relegada significativamente, generando una situación de falta de integración, a lo que se suman perjudiciales consecuencias sobre el déficit comercial y su efecto negativo en el campo social y tecnológico.
