Anglo American Platinum, el mayor productor mundial de platino, dijo el viernes que ha despedido a 12.000 trabajadores que secundaban una huelga ilegal que ya lleva tres semanas, llevando a los hechos sus duras palabras contra los conflictos que aquejan al sector minero de Sudáfrica.
Dos meses de inestabilidad laboral se han extendido de las minas a otros sectores de la mayor economía de África, causando problemas políticos al presidente Jacob Zuma y al Congreso Nacional Africano (CNA), el veterano movimiento de liberación que tiene un fuerte vínculo con los sindicatos.
La filial de Shell en Sudáfrica dijo el viernes que no puede garantizar que cumplirá contratos para entregar combustible en la zona de Johannesburgo debido a una huelga de camioneros comenzada hace dos semanas.
La policía disparó a otro minero huelguista durante la noche, lo que elevó a 48 el número de muertos en el peor conflicto laboral desde finales del apartheid.
El rand cayó un dos por ciento, cerca de mínimos de tres años frente al dólar, ante la preocupación de que el CNA no tenga capacidad para poder controlar la proliferación del conflicto laboral.
Zuma ha sido criticado por su débil respuesta al conflicto, en especial después de que la policía disparase en agosto a 34 mineros en huelga en el depósito Marikana de la minera Lonmin.
En un discurso a líderes empresariales el jueves, el presidente dio un giro positivo a la situación, al enfatizar que desde el fin de los gobiernos de minoría blanca los sudafricanos han mostrado "la capacidad de superar dificultades cuando trabajamos juntos".
"No deberíamos buscar representarnos a nosotros mismos como una nación que está luchando constantemente", sostuvo.
No obstante, el movimiento de liberación más antiguo de África teme por sus propias divisiones y es improbable que Zuma tome alguna medida para estabilizar a la economía que pueda incomodar a sus aliados políticos en los sindicatos.
"En la carrera a las elecciones, es improbable que el Gobierno proponga directrices políticas claras", dijo Simon Freemantle, analista de Standard Bank en Johannesburgo.
Reflejando estas preocupaciones, la rebaja en la calificación de crédito de Sudáfrica por parte de Moody's la semana pasada y la intensificación de las huelgas en el sector minero y en otros sectores están generando temores muy reales de un gran impacto en el ya débil crecimiento económico para este año.
El ministro de Finanzas, Pravi Gordhan, dijo que tendrá que reducir su pronóstico de crecimiento del 2,7 por ciento en 2012 cuando entregue el borrador del presupuesto provisional el 24 de octubre.
ATAQUE A MINEROS
Más de 75.000 mineros, o el 15 por ciento de la fuerza laboral en un sector que representa el 6 por ciento del Producto Interior Bruto, han participado en huelgas no autorizadas y las tensiones con fuerzas de seguridad y altos cargos mineros han escalado.
Cerca de la ciudad productora de platino de Rustenburg, 120 kilómetros al noroeste de Johannesburgo, trabajadores dijeron que un minero falleció debido al impacto de una bala de goma disparada en la noche por la policía.
"Fue disparado aquí por la policía", dijo Mbubhu Lolo, un huelguista de Anglo American Platinum a Reuters, señalando su vientre.
La policía no confirmó la causa de muerte. Las fuerzas de seguridad mantienen una fuerte presencia en la zona tras haber usado gases lacrimógenos y chorros de agua para dispersar a los manifestantes que arrojaban piedras el jueves.
El viernes, manifestantes en un pueblo cercano a cerca de una mina que pertenece a la megaminera Anglo American Platinum (Amplats) hicieron barricadas en las calles con piedras y llantas encendidas, ante la mirada de un contingente de más de 30 policías antidisturbios resguardados con vehículos blindados.
AngloGold Ashanti, el mayor productor de oro de Sudáfrica, ha perdido virtualmente toda su producción local debido a las huelgas, mientras que sus rivales Gold Fields y Harmony Gold también han sido afectados.
Cerca de 300 mineros en huelga en Kumba Iron Ore, una unidad de la minera global Anglo American, también bloquearon la mina Sishen, el gigante depósito de mineral de hierro de la compañía en la remota provincia sudafricana de Cabo del Norte.
reuters
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