El fabricante nipón de electrónica Sharp prevé recortar unos 11.000 empleos y vender activos para generar más de 2.000 millones de euros, según el plan de reestructuración de la empresa, parte del cual publica hoy la agencia local Kyodo. El proyecto, enviado esta semana a instituciones financieras niponas, muestra que para abril de 2014 Sharp prevé reducir en un 19 por ciento su plantilla de 57.170 empleados, lo que implica un recorte de 10.966, entre ellos unos 3.100 trabajadores nipones que se acogerán a un plan voluntario de jubilación anticipada.