El banco británico Ulster Bank incrementó sus pérdidas atribuidas durante el pasado año un 35 por ciento, hasta los 1.180 millones de euros, como consecuencia de las difíciles condiciones del mercado de crédito en Irlanda. En un comunicado, la entidad informó hoy de que sus cuentas se han visto afectadas negativamente por un aumento del 19 por ciento de las provisiones de pérdidas sobre préstamos deteriorados. Así, el fondo de contingencia acumulado por el banco para hacer frente a las posibles pérdidas de estos activos tóxicos se elevó hasta los 1.620 millones de euros, frente a los 1.360 millones de 2010.