Solar Millennium se convirtió en la segunda compañía solar alemana en declararse en suspensión de pagos en diciembre, siguiendo los pasos del fabricante de módulos fotovoltaicos Solon, después de no haber encontrado socios para proyectos de calado en Estados Unidos y España. Antes de que las acciones de la empresa fuesen suspendidas de negociación en bolsa el miércoles, estas se desplomaban un 9,3%, y las noticias también lastraban a otros títulos del sector como SolarWorld y Q-Cells.