Un fuerte seísmo de magnitud 7,1 sacudió el lunes los edificios de Tokio y una amplia sección del este de Japón, lo que llevó a emitir una alerta de tsunami que fue levantada poco después. El Servicio Geológico de Estados Unidos dijo que la réplica se registró a 38 kilómetros al oeste de la ciudad de Iwaki, a una profundidad de 13 kilómetros.