El dirigente libio Muamar Gadafi utilizó el martes tanques, helicópteros y cazas en su intento de frenar una revolución creciente, según testigos, después de burlarse de las noticias de que había huido del país tras cuatro décadas en el poder. Los aviones de la fuerza aérea bombardearon el martes algunas zonas de Trípoli en el segundo día de ataques contra la capital mediterránea, mientras mercenarios disparaban sobre los civiles, dijo Al Yazira. En la localidad de Al Bayda, en el este del país, uno de sus habitantes, Marai Al Mahry, dijo a Reuters por teléfono que 26 personas, entre ellas su hermano Ahmed, murieron durante la noche tiroteados por partidarios de Gadafi.