Analistas desaconsejan regreso de Argentina a mercados sin cambios políticos

Argentina cuenta con las condiciones para regresar a los mercados de capital internacionales, pero sin un cambio de política en Buenos Aires es arriesgado volver a invertir en deuda del país suramericano, concluyó hoy un grupo de analistas financieros especializados en Latinoamérica.

En su opinión, las dudas en terrenos como la transparencia de los datos económicos, la independencia de las instituciones o el impago de anteriores compromisos financieros reducen las posibilidades de que los inversores confíen de nuevo en la economía argentina una década después de la crisis de 2001.

El economista jefe para Latinoamérica de UBS, Javier Kulesz, se declaró un "creyente ferviente de que los elementos fundamentales de la economía argentina son sólidos" y de que su deuda no debería obtener peores calificaciones que la de Brasil o Perú.

"Me parece que mucho de este riesgo está vinculado a la política", valoró el analista en un simposio organizado por la Asociación de Operadores de Mercados Emergentes (EMTA, por su sigla en inglés).

En su opinión, si se mantiene la actual dirección política del país difícilmente podrá mejorar la calificación de su deuda, además de que la continuación de "los desequilibrios" en la gestión económica ponen en peligro la recuperación conseguida en la última década.

De igual manera, el analista de Moody's Patrick Esteruelas indicó que la situación de la economía argentina en general es positiva, gracias principalmente a la fortaleza de sus exportaciones, pero dudó que de que pueda mantenerse así con los presentes niveles de gasto público y una política monetaria que "alimenta la inflación".

Por su parte, el profesor de economía internacional de la American University, Arturo Porzecanski, presentó en el encuentro un extenso y devastador informe en el que concluyó que aún no se puede dar a Argentina la bienvenida a los mercados de capitales.

"Pese a la imponente recuperación económica, la capacidad del país de cumplir sus obligaciones financieras sigue siendo bastante limitada, y la actitud del Gobierno hacia los acreedores privados y públicos, además de hacia los fallos judiciales, es aún de desprecio", apuntó.

Entre otras cosas, señaló que Argentina permanece "al margen de la comunidad de naciones" debido a que es el único miembro del G20 que ha cesado de pagar la deuda a otros integrantes del grupo, se niega a que el Fondo Monetario Internacional (FMI) revise sus libros y afronta el mayor número de demandas de inversores en los mecanismos internacionales de resolución de disputas.

Porzecanski resaltó que el Estado ha gastado prácticamente todos los ingresos generados por el "boom" de las exportaciones, afronta serias acusaciones de manipulación de las cifras de la inflación y sigue sin resolver el problema causado por el cese de los pagos de la deuda a inversores privados y a los países del Club de París.

Además, consideró que los gobiernos del fallecido presidente Néstor Kirchner y su sucesora, su esposa Cristina Fernández, han socavado la independencia de las instituciones como demuestra, en su opinión, la destitución este año del presidente del Banco Central por negarse a utilizar reservas monetarias para el pago de deudas.

Estas situaciones, en opinión de los especialistas, eclipsan a los ojos de los inversores los logros de la economía argentina en la última década en el ingreso per cápita, la reducción del desempleo o el auge de las exportaciones, que registran una media anual de 60.000 millones de dólares.

Por su parte, el ex presidente del Comité Global de Tenedores de Bonos Argentinos, Hans Humes, resaltó que cualquier intento del Gobierno argentino de regresar al mercado internacional debe pasar por resolver los litigios entablados por sus acreedores tras el impago de la deuda externa.


EFE