Hay una sensación generalizada de que la bolsa va a subir Carlos Montero

En algunas ocasiones les he comentado que asisto periódicamente a reuniones “informales” de gestores y traders de mercado, en las que se discute, entre ¿cómo le va a tu hijo en la universidad?, o ¿salió tu madre bien de la operación?, el escenario económico y financiero que mantenemos en el corto plazo.

Traigo esta última reunión a colación, porque hacía años que no encontraba un ambiente inversor tan optimista. En promedio, estos inversores cualificados consideran que las bolsas a nivel global subirán más del 10% en 2014, aupadas por un fortalecimiento de la recuperación económica en EE.UU., junto con el inicio del crecimiento en Europa y Japón.

Son especialmente optimistas con las bolsas europeas y dentro de ellas con las periféricas. En los últimos años, la infraponderación de los grandes fondos internacionales a las bolsas de Italia, Portugal, España, Grecia, ha sido muy elevada. Los últimos datos de colocación de activos muestran que poco a poco esta infraponderación se está corrigiendo, lo que está provocando entrada de dinero extranjero. De cualquier forma, aún están muy lejos de llegar al promedio histórico, por lo que ante una normalización de la situación económica en estos países, cosa que reflejan ya las primas de riesgo, la entrada de dinero sería aún más agresiva. Eso sólo tiene una conclusión: Las bolsas periféricas subirán por encima de sus homólogas europeas.

Los gestores y traders de esta reunión, siempre hablando en promedio, estaban elevando sensiblemente su exposición a la bolsa española. Creen que la revalorización en 2014 podría superar los quince puntos porcentuales, frente a subidas del 10% previstas para el Eurostoxx 50. Por sectores recomendaban principalmente el bancario, seguido por el de tecnología. Están incrementando también el perfil de riesgo en sus carteras, reduciendo los niveles de liquidez.

Entre los riesgos que plantean a este escenario tan optimista, destacan los geopolíticos. Un recrudecimiento de la situación en Siria o Irán, daría al traste con este escenario. En ámbito más local, también se muestran preocupados por la situación política en España, y las pretensiones independentistas de Cataluña. Hasta este momento, los inversores internacionales no están recogiendo en sus modelos operativos la posibilidad de una disgregación del Estado español, pero esa posibilidad existe. Si las tensiones independentistas en Cataluña se incrementan, cosa que sucedería si finalmente se celebra en 2014 la consulta popular que plantea la Generalitat, es posible que los fondos internacionales aumentaran su percepción del riesgo de los activos españoles, y trasladaran sus posiciones a otros mercados sin tanta incertidumbre, aunque con el mismo potencial de recuperación como Italia o Portugal. Este creo que es un tema político y social a vigilar estrechamente desde el punto de vista financiero.

La conclusión de este interesante encuentro es que si en algún momento hubo una sensación generalizada de que la bolsa es el mejor activo donde estar invertido, ese momento es ahora. Aunque ya saben lo que dicen de la opinión contraria…cuando todo el mundo mira hacia un mismo sentido, lo más probable es que el mercado se vuelva hacia el otro. ¿Se cumplirá también esta vez?