El sector industrial reiteró reclamos por el alza de costos, las demoras en la autorización de importaciones de insumos, los retrasos en el pago de los reintegros a la exportación y saldos técnicos de IVA y la constante pérdida de rentabilidad.
En el marco del 6º Coloquio de la Unión Industrial de Córdoba (UIC), que se realiza hasta hoy, los empresarios cuestionaron las políticas nacionales y los funcionarios provinciales marcaron diferencias con el Gobierno.
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez, mencionó entre los principales problemas de la industria al freno que sufre en las compras al exterior y la demora en el pago de los reintegros. Admitió, sin embargo, que en los últimos días algunas empresas habían cobrado, aunque otras tienen retrasos de hasta un año.
El presidente del Coloquio y dueño de la fábrica de acoplados Cormetal, Sergio Montagner, planteó que "no existen reglas de juego claras" para producir en la Argentina y afirmó que a los empresarios les "gusta ganar dinero, para invertir en la empresa y poder generar más riqueza".
A su vez, el ministro de Producción de Córdoba, Jorge Lawson, admitió que "una firma tiene que ganar dinero para poder derramar en la sociedad".
El Presidente de la UIC, Ercole Felippa, dijo que "la pelea" entre el gobernador cordobés José Manuel De la Sota y la Nación "les cuesta caro" y que "los empresarios resultan rehenes" de la disputa política.
El dirigente, quien desde mayo también integra el comité ejecutivo de la UIA, se mostró preocupado por la creciente pérdida de competitividad, la caída en los márgenes de algunas empresas y la rentabilidad negativa en sectores exportadores; la inflación y la escasez de insumos producto de las trabas a las importaciones.
También apuntó que "el problema de la competitividad no es un tema sólo de tipo de cambio". De todas formas, ante el dato de que el ritmo de devaluación se aceleró a 20 por ciento anual, Felippa señaló que eso muestra que "el Gobierno toma nota" de la existencia de un problema.
La provincia de Córdoba concentra entre 9 y 10 por ciento de la producción fabril del país, con fuerte impulso de la rama automotriz, y en las últimas semanas tuvo líneas y plantas de producción paradas tanto por la falta de materiales para los procesos de fabricación como por los cortes de suministro de gas.
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez, mencionó entre los principales problemas de la industria al freno que sufre en las compras al exterior y la demora en el pago de los reintegros. Admitió, sin embargo, que en los últimos días algunas empresas habían cobrado, aunque otras tienen retrasos de hasta un año.
El presidente del Coloquio y dueño de la fábrica de acoplados Cormetal, Sergio Montagner, planteó que "no existen reglas de juego claras" para producir en la Argentina y afirmó que a los empresarios les "gusta ganar dinero, para invertir en la empresa y poder generar más riqueza".
A su vez, el ministro de Producción de Córdoba, Jorge Lawson, admitió que "una firma tiene que ganar dinero para poder derramar en la sociedad".
El Presidente de la UIC, Ercole Felippa, dijo que "la pelea" entre el gobernador cordobés José Manuel De la Sota y la Nación "les cuesta caro" y que "los empresarios resultan rehenes" de la disputa política.
El dirigente, quien desde mayo también integra el comité ejecutivo de la UIA, se mostró preocupado por la creciente pérdida de competitividad, la caída en los márgenes de algunas empresas y la rentabilidad negativa en sectores exportadores; la inflación y la escasez de insumos producto de las trabas a las importaciones.
También apuntó que "el problema de la competitividad no es un tema sólo de tipo de cambio". De todas formas, ante el dato de que el ritmo de devaluación se aceleró a 20 por ciento anual, Felippa señaló que eso muestra que "el Gobierno toma nota" de la existencia de un problema.
La provincia de Córdoba concentra entre 9 y 10 por ciento de la producción fabril del país, con fuerte impulso de la rama automotriz, y en las últimas semanas tuvo líneas y plantas de producción paradas tanto por la falta de materiales para los procesos de fabricación como por los cortes de suministro de gas.
nosis