Segunda: ¿La empresa que elegís para invertir tiene un nivel de deuda manejable?
No es lo mismo tener en cartera acciones de una empresa cuyo valor de mercado no para de caer y que se encuentra en una posición financiera delicada que otra a la que le ocurre lo mismo, pero es solvente y su ratio de apalancamiento no supera el 40%.
El ratio de apalancamiento es una fórmula que compara el endeudamiento de una empresa con sus activos. Es muy sencillo calcularlo. Veámoslo con las acciones de Disney (DIS).
Ingresando a Yahoo Finance , en la solapa “Estadísticas”, podremos ver los ratios financieros más importantes de la empresa. Lo que debemos hacer es tomar primero “Deuda total”, que en este caso es de 51,93 billones de dólares (para nosotros, miles de millones). Luego, tomamos “Valor de la empresa”, que es de 260,38 billones de dólares. Finalmente, dividimos Deuda Total / Valor de la Empresa y obtenemos el resultado, que en este caso es 0,1995, lo cual quiere decir que el ratio de apalancamiento de Disney es del 19,95%. Por lo tanto, supera la prueba del 40% que nos pusimos como tope para aceptar una inversión.
La interpretación de los números es la siguiente: por más que las acciones de DIS y su negocio se recientan en el corto plazo por la crisis, tiene espalda suficiente como para saldar sus compromisos financieros hasta que vengan tiempos mejores. El default no es un riesgo inminente.
Si hacemos el mismo cálculo y nos da un resultado de, por ejemplo, 50% o más, significa que la compra de acciones puede transformarse en una aventura que no terminará nada bien. Incluso, aunque a la larga evite el default, el miedo creciente a que quiebre la compañía nos puede llevar a malvender la posición antes de los dos o tres años que habíamos proyectado.
Tercera: ¿Estás preparado para soportar caídas del 50%?
El inversor bursátil debe ser capaz de tolerar para el worst case scenario (el peor de los escenarios) cuando compra acciones en contextos como el actual. Caídas del 50% a poco tiempo de haber abierto la posición de largo plazo son posibles. Por eso, es importante sincerarse con uno mismo y establecer si se tiene o no estómago para aguantar las pérdidas momentáneas, que se realizan a menos que desarme la posición en esas acciones.
La comprensión de la diferencia entre unrealized G/L y realized G/L (pérdidas/ganancias no realizadas y realizadas) es vital a la hora de operar. En Bolsa, las únicas ganancias o pérdidas son las realizadas. Un activo que no se vende es un activo que aún no arrojó ningún resultado concreto. Bien lo saben quienes acumulaban formidables ganancias a principio de año y, por no realizarlas, hoy ven cómo sus papeles cotizan bastante por debajo del precio de compra.
Dicho esto, resultan graciosos los títulos que afirman que Jeff Bezos y Mark Zuckerberg (principales accionistas de Amazon y Facebook) perdieron billones de dólares con el derrumbe del mercado. Bezos y Zuckerberg son inversores de largo plazo en sus propias empresas y no tienen pensado desprenderse de esas posiciones mayoritarias, por lo que no están perdiendo ni ganando nada con el movimiento de las acciones. En todo caso, el precio de los papeles contará el día que decidan vender una parte de sus empresas o directamente retirarse, pero no es el caso hoy.
El inversor bursátil debe estar preparado para pérdidas no realizadas y momentáneas del 50% tanto en contextos normales como en situaciones de alta incertidumbre local o mundial.
Conclusión
Para ver la luz verde en el camino de la inversión en acciones en escenarios de crisis y pánico como el actual, las 3 respuestas a estas preguntas deben ser afirmativas.
Lo contrario sería comprar porque queremos participar del juego de la ambición y nos convencemos de que el mercado llegó a un piso, cuando no tenemos ni idea si eso realmente es así. Otros pueden comprar porque escucharon a un analista decir que el mercado está reaccionando exageradamente a las noticias o simplemente porque quieren promediar las pérdidas momentáneas que acumulan tras haber adquirido acciones al doble del valor actual. Se trata, en todos los casos, de errores que casi siempre terminan muy mal.
Ser estricto en este autotest del inversor de largo plazo te permitirá saber qué camino conviene tomar en este mar de grandes ganadores y perdedores. No minimices el resultado. Es tu dinero el que está en juego. Sabemos que son tiempos difíciles: el coronavirus vino a cambiar nuestras vidas, y el cumplir con la cuarentena ya es un tema de responsabilidad civil, además de cuidado de salud personal. Pero en estudinero! queremos ayudarte a pasar este lapso de tiempo de la mejor manera posible y transformar este paréntesis en nuestra vida normal en algo productivo: estamos lanzando la promoción Cuarentena, rebajando a la mitad (sólo por unos días) el precio de nuestro curso online de Finanzas Personales para Principiantes, y activándolo para que comiences a cursar ni bien te anotes.
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