A 40 años del golpe genocida Con las banderas en alto luchando por el socialismo

El lunes 21/03 a las 18.30 en Belgrano 2527 (CABA), desde Izquierda Revolucionaria y la Agrupación Política Hombre Nuevo, acompañados por el historiador Héctor Lobbe y por Juan Martín Guevara (ex militante del PRT y hermano del Che), conmemoramos los 40 años del golpe genocida y recuperamos el ejemplo de de los/as compañeros/as que apostaron todo a la lucha revolucionaria y socialista en nuestro país.

El golpe del 24 de marzo de 1976 instauró una dictadura contrarrevolucionaria. El terrorismo de estado y la perpetración del genocidio buscaron aniquilar a la fuerza revolucionaria que, con diversas perspectivas políticas, había disputado el poder en nuestro país. Y para ello no sólo se ensañaron con sus organizaciones y cuadros políticos, siguiendo las enseñanzas de contrainsurgencia a nivel mundial, destruyeron las crecientes experiencias de organización popular. El golpe, llevado a cabo por la casta militar pero financiado, promovido, planificado por las clases dominantes, buscó modificar a largo plazo las relaciones de fuerza. Esas clases dominantes incluyen al imperialismo, en particular al imperialismo yanqui que cumplió y cumple el rol de garante del capitalismo. Y así como el avance de la revolución había sido continental, la contrarrevolución también lo fue.

Para quienes entendemos que la experiencia del PRT – ERP constituye el punto más elevado de la lucha de clases en nuestro país, la construcción de una alternativa revolucionaria de poder es la principal tarea pendiente. Para dar pasos certeros en ese sentido nos apoyamos en esa experiencia. Habrá que extraer enseñanzas para perfeccionar la acción, pero siempre desde la certeza de que la revolución es innegociable. Como nos enseñó el Che “El poder es el objetivo estratégico sine qua non de las fueras revolucionarias y todo debe estar supeditado a esta gran consigna”. Habrá que construir con creatividad en una situación como la actual, evitando los atajos que inevitablemente concluyen en los callejones sin salida del oportunismo o del reformismo.

Este no es un 24 de marzo más. Se cumplen 40 años del más sanguinario golpe de Estado en nuestro país. Sucede, además, en el marco regresivo del gobierno macrista, representante de los grandes grupos económicos. Y por si fuera poco, se lleva adelante con la indignante presencia del presidente de EEUU en nuestro país. Frente al ajuste, represión y subordinación servil al imperialismo que representa el macrismo (y que tiene variados correlatos en el continente); frente a las reformas parciales y parcializadas que produjo el kirchnerismo y que se convierten, ahora, para la centroizquierda en un programa de máxima por el retorno; frente a una izquierda hegemónica dentro del activismo que reniega de la lucha por el poder y de nuestra identidad nuestro americana, la tarea de la hora es poner en pie una verdadera estrategia de poder revolucionaria y socialista. Hoy, más que nunca, salimos a la calle a luchar, por los derechos humanos de ayer y de hoy, recuperando el legado de los 30.000, contra el ajuste, la represión y la entrega al imperialismo. Con las banderas del Che, de Santucho y de nuestros 30.000.