El Banco de Inglaterra (BoE) limitará el alcance de sus pruebas de esfuerzo a las entidades con depósitos minoristas por importe superior a 50.000 millones de libras (algo más de 68.000 millones de euros), lo que restringe los test a RBS, Lloyds, HSBC, Standard Chartered, Nationwide Building Society y Santander UK, entidades responsables de alrededor del 80% del crédito en Reino Unido.