Las Bolsas europeas intentan construir un suelo apoyándose en los datos macro El Ibex 35 sube un 0,62% a 9.866,2

Las acciones europeas han cerrado con subidas generalizadas a pesar de una sesión asiática mixta donde los decepcionantes datos comerciales plantearon preguntas sobre el ritmo de crecimiento de China. Los buenos datos de exportación en Alemania y la revisión al alza del crecimiento de la eurozona, compensaron el sentimiento negativo proveniente de Asia.

El Ibex 35 sube un 0,62 por ciento a 9.866,2 y el Euro Stoxx 50 asciende un 1,22 por ciento a 3.236,85.

El paneuropeo FTSE Eurofirst 300 finaliza con un avance del 1,25 por ciento y el S&P 500, que se mantuvo cerrado el lunes por la festividad del Día del Trabajo, gana un 1,6 por ciento a 1.951 - recuperando 31 puntos después de caer 29 el viernes.

El mejor desempeño entre los índices europeos vino del alemán DAX 30, que recupera un 1,6 por ciento. La decisión se produjo después de que la oficina de estadísticas de Alemania dijera que el superávit comercial del país alcanzó un récord en julio, gracias a un aumento de las exportaciones.

La zona del euro creció un 0,4 por ciento en el segundo trimestre, según datos oficiales, una revisión al alza de una primera estimación del 0,3 por ciento. "El crecimiento de la zona euro en el primer y segundo trimestre fue mejor de lo pensado inicialmente," dijo el analista Craig Erlam de la firma de de comercio Oanda.

"Las expectativas eran que los números permanecieran sin cambios, así que esto es probable que ayude a elevar la confianza en Europa."

Los datos de crecimiento de hoy son "una dosis doble de noticias modestamente buenas" para la eurozona, dice Howard Archer de IHS Global Insight. Señala que el crecimiento de la zona euro interanual alcanzó un máximo de cuatro años del 1,5% en el segundo trimestre, frente al 1,2% en los primeros tres meses de 2015.

Archer explica que la crisis griega podría haber frenado el crecimiento: "El euro y los precios del petróleo apoyaron al crecimiento de la zona euro en el segundo trimestre, a pesar de que estuvieron por encima de sus mínimos del primer trimestre."

Muchos analistas pensaron que las pérdidas de Wall Street al final de la semana pasada se produjeron porque muchos traders no quisieron mantenerse expuestos ante un largo fin de semana, y ahora están reconstruyendo posiciones alcistas.

El principal tema de conversación en la sesión fueron los datos comerciales de China.

El valor de las importaciones cayó un 14,3 por ciento interanual en términos de divisa local en agosto, un descenso mucho más pronunciado que el 8,6 por ciento de caída de julio. Fue la décima caída consecutiva de las importaciones de China y el peor desempeño desde mayo, aumentando la preocupación de que la vacilante demanda interna afecte sensiblemente a los países que tienen una alta dependencia de las exportaciones a China.

Las exportaciones cayeron un 6,1 por ciento en tasa interanual, frente a un descenso del 8,9 por ciento en julio. Como resultado, el superávit comercial aumentó casi un 40 por ciento mes a mes a Rmb368bn ($ 57.8bn), justo por debajo del récord Rmb370bn establecido en febrero.

Esta semana conoceremos los datos de inflación, ventas minoristas y producción industrial en China.

Sin embargo, la reacción del mercado a los datos de comercio fue mucho más positiva de lo que cabría esperar, con algunos analistas señalando que las cifras podrían haberse visto distorsionados por la explosión en el puerto de Tianjin y el cierre de muchas fábricas para evitar la contaminación antes del desfile del Día de la Victoria.

El índice Shanghai Composite subió un 2,9 por ciento después de disfrutar de su ya tradicional rally en la última hora de negociación - que se cree se debe a una intervención oficial.

Los productos industriales también hicieron caso omiso del informe, con el cobre subiendo un 5,2 por ciento, ya que los recortes de producción están aumentando la confianza, y el crudo Brent recupera un 3,7 por ciento a $49,42 el barril.

Las monedas de los mercados emergentes - tales como la lira turca y el rand sudafricano - están rebotando tras las recientes pérdidas que vinieron por las preocupaciones no sólo sobre el menguante crecimiento de China, sino también el próximo incremento en las tasas de interés de Estados Unidos.

El dólar estadounidense cotiza con moderadas caídas, con su índice de comercio ponderado perdiendo un 0,2 por ciento a 96,04. La libra mostraba una especial fortaleza después de la oferta de 3.5000 millones de libras de Mitsui Sumitomo por la aseguradora británica Amlin.

Los traders del mercado de divisas señalaban que la caída del billete verde es el resultado de una menor probabilidad de una subida de tipos de la Fed en septiembre tras los datos comerciales chinos.

Sin embargo, no hay evidencia de esto en el mercado del Tesoro de EE.UU. que regresa después de las vacaciones del lunes. El rendimiento del bono EEUU a 2 años, que tiene especial sensibilidad por los movimientos de la Reserva Federal, sube 2 puntos básicos al 0,73 por ciento, cotizando unos pocos puntos básicos por debajo de los máximos de cuatro años.

Los rendimientos del bono EEUU a 10 años suben 5 pbs al 2,18 por ciento y el vencimiento equivalente del Bund alemán cotiza plano en el 0,68 por ciento.

El yen se fortaleció a Y118.86 por dólar, pero cae un 0,40 por ciento a Y119,73.

El oro sube $2 a $1.123 la onza.