(EFE Dow Jones)--El gigante británico de la banca HSBC HoldingsHSBA.LN -1.64% PLC se vio nuevamente afectado por publicidad embarazosa este fin de semana, cuando diversos medios de comunicación filtraron un buen número de detalles hasta la fecha desconocidos sobre los servicios que prestaba su filial suiza a personajes indeseables y evasores fiscales.
La rama suiza de HSBC lleva años atrayendo una atención no deseada, tras un sonado robo de datos por parte de un exempleado y la apertura de una investigación por parte de las autoridades estadounidenses para descubrir si la entidad ayudó a evadir impuestos.
Los nuevos detalles aportados por el exempleado de HSBC Hervé Falciani al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación --ICIJ, por sus siglas en inglés-- y a varios medios ilustran de qué maneras habría protegido el banco cuentas secretas de “dictadores y traficantes de armas”, así como de estrellas del rock.
Pero también se describen los modos en que el banco habría asesorado a los clientes para evitar pagar impuestos en sus países natales, entre otros detalles.
Franco Morra, máximo responsable de la rama suiza de HSBC, dijo el lunes que la división “comenzó una transformación radical en 2008 para evitar que sus servicios se utilizaran para evadir impuestos o blanquear dinero. La nueva dirección ha remodelado exhaustivamente el negocio, ha cerrado cuentas de clientes que no cumplían los elevados estándares [de la entidad] y se ha asegurado de que existen sólidos procedimientos de control”. El directivo agregó que los nuevos detalles dados a conocer sirven para recordar que “el viejo modelo de negocio de la banca privada suiza ya no es aceptable”.
La historia de Falciani, un analista informático de HSBC convertido en informante, no es nueva. The Wall Street Journal publicó un perfil suyo en 2010 en el que se señalaba que había enviado correos electrónicos a diversas autoridades europeas a las que dio una lista de clientes del banco que evadían impuestos.
La fiscalía suiza anunció a finales del pasado año que había presentado cargos contra Falciani por delitos como espionaje industrial o violación del secreto bancario suizo, tras descubrir su identidad y a qué se dedicaba en diciembre de 2008.
En 2012, Falciani fue arrestado en España en virtud de una orden de detención internacional, pero un tribunal español dictaminó en contra de su extradición en 2013. La fiscalía suiza dijo recientemente en un comunicado que Falciani podría ser juzgado en rebeldía en Suiza.
Una portavoz de la fiscalía suiza no respondió a una solicitud para recabar sus comentarios.