Investing.com – Los futuros sobre petróleo registraron mínimos de más de cinco años este lunes aún lastrados por las preocupaciones suscitadas en torno a la superabundancia de las reservas a escala mundial.
El petróleo Brent para entrega en febrero se negoció en el ICE Futures Exchange de Londres a 55,26 USD por barril, su cota más baja desde abril de 2009, para situarse después en 55,60 USD durante la mañana de la jornada de negociación en Europa, con un retroceso del 1,45% u 82 centavos.
Los precios del Brent que se negocian en Londres cerraron la jornada del viernes con un retroceso del 1,59% o 91 centavos y un precio de liquidación de 56,42 USD por barril. El contrato de Brent de febrero se desplomó la semana pasada un 5,1% o 3,23 USD, siendo ésta la sexta caída semanal consecutiva.
Por otra parte, el petróleo para entrega en febrero se negoció en el New York Mercantile Exchange a 51,92 USD por barril, con un retroceso del 1,47% o 78 centavos, tras registrar mínimos de la sesión en 51,45, su cota más baja desde mayo de 2009.
Los futuros sobre petróleo del Nymex cerraron la jornada del viernes en 52,69 USD por barril, retrocediendo un 1,09% o 58 centavos. Los precios se habían desplomado la semana pasada un 3,73% o 2,36 USD, registrando pérdidas por sexta semana consecutiva.
Los futuros sobre Brent que se negocian en Londres han retrocedido cerca de un 48% en 2014, mientras que los futuros del WTI retrocedieron casi un 46% después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo decidiera mantener su objetivo de producción en 30 millones de barriles al día.
Esta decisión no cumplía con las expectativas de que el cártel petrolero redujera la producción para reforzar el mercado ya que se ha producido un superávit de petróleo de esquisto en Estados Unidos, que avanza a su ritmo más rápido en más de 30 años.
Mientras, el índice dólar, que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, avanzó un 0,21% hasta situarse en el nivel de 91,67, máximos de nueve años.
El índice se disparó en 2014 un 12%, impulsado por las diferencias entre las posturas de política monetaria de la Reserva Federal y los bancos centrales de Europa y Japón.
Los precios del petróleo suelen debilitarse cuando la divisa estadounidense sube, pues se abaratan las materias primas denominadas en dólares de cara a titulares de otras divisas.
De cara a la semana que comienza, los inversores estarán pendientes del informe del viernes sobre empleo no agrícola de Estados Unidos, para conocer más indicios acerca del ritmo de recuperación del mercado laboral. Las actas de la reunión de la Reserva Federal del miércoles también han levantado una gran expectación.