Las bolsas europeas por fin rebotan tras seis días de descensos El Ibex 35 finaliza la sesión con un avance del 1,81% a 10.083,1

Las turbulencias en los mercados financieros rusos han golpeado la confianza de los inversores, presionado a las acciones europeas e impulsando a los activos considerados refugio como el yen, el oro y los bonos. Sin embargo, el rebote de última hora del petróleo y de Wall Street, supuso una recuperación final de la renta variable para cerrar en positivo.

Los decepcionantes datos manufactureros de China están poniendo más presión sobre el precio del petróleo, que ha caído por debajo de los 60 dólares el barril por primera vez en más de cinco años.

Las bolsas europeas se mantuvieron bajo presión en la primera mitad de la sesión, aunque la aparición de "cazagangas" en los sectores más castigados como el Petrolero, y un rebote de Wall Street (Dow Jones +1,35%) provocó una recuperación en la segunda mitad de la sesión.

Así, el Ibex 35 finaliza la sesión con un avance del 1,81% a 10.083,1 y el Euro Stoxx 50 cierra con una subida del 2,28% a 3.048,09.

Gran parte de la reciente ola vendedora en Wall Street y en otros lugares ha venido con la fuerte caída de los precios del petróleo, que algunos traders temen sea una señal no sólo del aumento de la oferta, sino de una débil demanda relacionada con una desaceleración económica mundial.

Los más afectados por la caída en Brent son los países que dependen fuertemente de las exportaciones de energía. Esto es especialmente grave para Rusia, que también está teniendo que hacer frente a unas sanciones económicas relacionadas con su participación en la crisis de Ucrania.

Después de que el rublo ruso se desplomara más de un 10 por ciento el lunes a un mínimo histórico, el banco central elevó su tasa de interés desde el 10.5 por ciento al 17 por ciento, apenas cinco días después de la subida de tipos anterior.

El banco central dijo que era necesario "para limitar los riesgos de devaluación y de inflación", y también advirtió que la economía rusa podría contraerse hasta en un 4,7 por ciento el próximo año si los precios del petróleo se mantienen en $60 por barril.

La medida tuvo un efecto inmediato, con el rublo rebotando más de un 10 por ciento al principio de la sesión europea. Pero el rally no duró mucho para volver a tocar otro mínimo histórico de 80 rublos por dólar y suavizar la caída después.

El índice de acciones de Moscú Micex, que en un momento descendió un 8,5 por ciento a un nuevo mínimo de cuatro meses, logró girarse y avanzar un 1,3%. Los bonos soberanos rusos sufrieron un gran castigo.


¿Cómo de mala es la situación en Rusia?   

Muy mala. Las autoridades rusas tienen ahora en sus manos "una crisis del rublo en toda regla", dice Timothy Ash, de Standard Bank.

El peor escenario para las autoridades rusas es una repetición de la crisis financiera de 1998, un pánico monetario que sumió a Rusia en una recesión profunda y dolorosa, enviando ondas de propagación a través de los mercados financieros de todo el mundo.

En agosto de ese año, los temores de una devaluación del rublo llevaron al colapso de las acciones, bonos y de divisas en los mercados de Rusia. El Banco Central dio a conocer unas medidas de emergencia, pero no pudieron vencer a los mercados.

El rublo perdió tres cuartas partes de su valor en tres semanas. El banco finalmente subió los tipos hasta el 100% y Rusia dejó de pagar sus deudas. El siguiente año la inflación se disparó al 85% y la gente salió a las calles por los altos precios de los alimentos.


¿Qué opciones tienen las autoridades rusas para frenar esta crisis?  

Realmente, no muchas.

1) El banco central puede continuar defendiendo el rublo, gastando sus reservas de divisas para apoyar la moneda. Aunque Rusia tiene una de las mayores reservas de divisas del mundo debido a sus ingresos por el petróleo y gas, su efectivo se está reduciendo rápidamente. En 2014, se gastaron 80 mil millones de dólares para apoyar el rublo, alrededor de una quinta parte del valor de sus reservas.

2) El banco podría elevar las tasas de nuevo, pero esta sería perjudicial para los prestatarios, agravando la desaceleración económica del país.

3) La otra opción es el control cambiario - impedir que la gente saque dinero del país. Pero esto podría convertir una crisis en un pánico en toda regla.


El oro, que cayó 29 dólares el lunes, según datos de Reuters, ante rumores que señalaban que Moscú podría tener que vender algunos de sus lingotes para recaudar dinero, se está recuperando 3 dólares a 1.195 dólares la onza, aunque llegó a superar los 1.200 dólares en medio del nerviosismo general.

Los inversores buscaron la seguridad de la deuda soberana de alta calificación, empujando a muchos rendimientos a mínimos históricos. La rentabilidad del bono alemán a 10 años ha bajado 7 puntos básicos al 0,56 por ciento, nuevo mínimo histórico, a pesar del informe Zew positivo. La rentabilidad del bono alemán cerró con una caída de 2 pbs hasta el 0,60%.

Los problemas en Rusia también están alimentando la incertidumbre en otros mercados emergentes, ya sacudidos por los signos de desaceleración del crecimiento en China y las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos comenzará a subir las tasas de interés el próximo año. La rupia indonesia ha caído a su nivel más bajo en 16 años y el índice de acciones emergentes FTSE está en su nivel más bajo desde febrero. Los mercados de valores del Golfo han recibido un duro golpe.