Hugo Moyano impulsará con los gremios del transporte una movilización contra el Impuesto a las Ganancias, una queja recurrente en un sector cuyos trabajadores se encuentran en su mayoría alcanzados por el tributo.
Con esa medida -que avanza en paralelo con una movilización de jubilados-, el camionero reforzará además su alianza con sindicatos que en lo formal reportan a la CGT oficialista, de Antonio Caló, pero que se distanciaron del Gobierno. Para el jefe de la CGT opositora es un objetivo en sí mismo recuperar protagonismo entre los gremios del transporte.
Es que luego de la división en 2012 de la central obrera, a principios del año siguiente fue creado un nucleamiento de sindicatos del sector alineado con la vertiente de Caló. Lo hizo el taxista Omar Viviani, que entonces logró agrupar en la Unión General de Trabajadores del Transporte (UGATT) la mayoría de organizaciones. La existencia en paralelo de la UGATT y de la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT), que responde a Moyano, terminó por licuar el protagonismo de ambas.
Pero en los últimos meses, y a caballo de la mala relación del ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, con los sindicatos de colectiveros (UTA) y maquinistas de trenes (La Fraternidad), el camionero logró capitalizar la fuga de sus jefes, Roberto Fernández y Omar Maturano, respectivamente, señala Ámbito Financiero.
Ambos fueron vitales para el éxito del paro del 10 de abril. Y fueron responsables también de haber incorporado la inseguridad al pliego de demandas del sector. En esa misma sintonía, Moyano buscará armar con esos dirigentes una próxima movilización orientada específicamente a los reclamos sectoriales: Ganancias y la demanda por una ley federal de transporte. Maturano, secretario general de la UGATT, confirmó que coordinará la semana próxima con su par de la CATT, Juan Carlos Schmid (sindicato de dragado y balizamiento) un encuentro para avanzar en un discurso unificado. Cerca de Moyano fueron más allá y dieron por hecho que de ahí surgirá una movilización.
Con esa medida -que avanza en paralelo con una movilización de jubilados-, el camionero reforzará además su alianza con sindicatos que en lo formal reportan a la CGT oficialista, de Antonio Caló, pero que se distanciaron del Gobierno. Para el jefe de la CGT opositora es un objetivo en sí mismo recuperar protagonismo entre los gremios del transporte.
Es que luego de la división en 2012 de la central obrera, a principios del año siguiente fue creado un nucleamiento de sindicatos del sector alineado con la vertiente de Caló. Lo hizo el taxista Omar Viviani, que entonces logró agrupar en la Unión General de Trabajadores del Transporte (UGATT) la mayoría de organizaciones. La existencia en paralelo de la UGATT y de la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT), que responde a Moyano, terminó por licuar el protagonismo de ambas.
Pero en los últimos meses, y a caballo de la mala relación del ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, con los sindicatos de colectiveros (UTA) y maquinistas de trenes (La Fraternidad), el camionero logró capitalizar la fuga de sus jefes, Roberto Fernández y Omar Maturano, respectivamente, señala Ámbito Financiero.
Ambos fueron vitales para el éxito del paro del 10 de abril. Y fueron responsables también de haber incorporado la inseguridad al pliego de demandas del sector. En esa misma sintonía, Moyano buscará armar con esos dirigentes una próxima movilización orientada específicamente a los reclamos sectoriales: Ganancias y la demanda por una ley federal de transporte. Maturano, secretario general de la UGATT, confirmó que coordinará la semana próxima con su par de la CATT, Juan Carlos Schmid (sindicato de dragado y balizamiento) un encuentro para avanzar en un discurso unificado. Cerca de Moyano fueron más allá y dieron por hecho que de ahí surgirá una movilización.