El reciente destape del escándalo de corrupción alrededor del empresario K, Lázaro Báez, pone de manifiesto una situación que repercute sobre toda Latinoamérica. En 2010, en días que el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, era señalado como el principal lobbysta en favor de los empresarios K en la región (por órden de Néstor como parte de su herencia), OPI Santa Cruz publicó un informe dando cuenta de las actividades de Báez en Venezuela. EL debilitamiento del chavismo y el destape de la corrupción K auguran el próximo fin de una era.
(Urgente24) - En abril de 2010 diferentes medios revelaron el efecto del lobby que el ministro Julio de Vido hacía en favor de empresarios K en Venezuela y Paraguay principalmente, por orden deNéstor Kirchner como parte de una herencia que el gobierno de Cristina de Kirchner recibió del gobierno de su esposo.
Beneficiado por el lobby K, Lázaro Báez, empresario que en este momento está señalado como parte de un gigantesco entramado de corrupción del gobierno de los Kirchner, logró montar una serie de empresas en Venezuela que sirven en áreas estratégicas del sector energético de ese país. Así lo relataba OPI santa Cruz en esos días:
Podría decirse que EPSUR S.A. fue creada en el 2005 para hacer negocios en Venezuela. Sin embargo, la petrolera propiedad de Báez fue la empresa testigo que tejió una serie de acuerdos, convenios y constituyó empresas en las tierras de Chávez para desarrollar a partir del año 2005/2006 negocios en el campo de la explotación y exploración petrolera. Lo hizo en Venezuela y otros países latinoamericanos. Epsur de Venezuela SA, Argentum C.A, Prosur de Venezuela C.A y OPICA Consultores C.A son algunas de las empresas creadas, formadas o relacionadas con intervención de la petrolera que maneja el hijo de Lázaro, Martín Báez.
La empresa argentina EPSUR S.A, propiedad del empresario Lázaro Báez hizo su aparición el 30 de noviembre de 2005 entrando en Venezuela de la mano de su (por entonces) Presidente, Orlando “Teddy” Batista (DNI 12.593.549) para conformar una asociación de empresa binacional con ARGENTUM C.A, inscripta en el Registro Mercantil V de la Circunscripción Judicial del Distrito Capital y Estado Miranda, en Venezuela. Ambas firmas conformaron una nueva empresa denominada “EPSUR de Venezuela C.A” con domicilio en la ciudad de Caracas.
Argentum CA fue representada en aquel momento por el venezolano Fernando Grisanti, (C.I V-8.845.338) y la nueva sociedad “EPSUR de Venezuela C.A” desde un principio estuvo representada en su directorio por el propio Batista y Marcelo Recchia (C.I E-80.338.701) otro argentino, quienes conformaron aquella Junta Directiva por la participación accionaria de EPSUR S.A mientras el venezolano Grisanti lo hizo por la participación de ARGENTUM CA.
La finalidad de la firma binacional, tal como figura en el objeto expresado en la formalidad del Registro venezolano, fue la ejecución de todas las actividades relacionadas con la cuantificación de reservas de hidrocarburos incluyendo la importación, utilización y comercialización de equipamiento y tecnologías, provisión de personal especializado y del servicio de asesoramiento técnico, así como la ejecución o contratación de todas las tareas conexas relacionadas con este objeto.
También se agregó al objeto societario la realización de proyectos y ejecución de obras civiles, metalmecánica mecánicas y eléctricas relacionadas con la industria de los hidrocarburos, incluyendo construcción, remodelación y mantenimiento de edificaciones e instalaciones de todo tipo, obras de vialidad y asfaltado, importación y comercialización de toda clase de artículos, materiales, insumos, tecnologías y equipos y el suministro de mano de obra calificada, personal especializado, asesoramiento en general, así como la ejecución o contratación de todas las tareas conexas relacionadas con este objeto.
Siguiendo con el perfil de EPSUR SA en Argentina, la nueva empresa declaró estar disponible para la prestación de los Servicios requeridos por la industria de los hidrocarburos incluyendo la perforación, completacion (SIC), reparación, rehabilitación y servicios de pozos, servicio de fluidos de perforación y completación, cementación de pozos, mediciones físicas y pruebas de producción mantenimiento de instalaciones, remediación y mantenimiento ambiental. Fabricación, importación, comercialización, alquiler, contratación y utilización de toda clase de artículos, materiales, insumos, tecnologías y equipos para la industria, suministro de mano de obra calificada, personal especializado, asesoramiento en general, así como la ejecución o contratación de todas las tareas conexas relacionadas con este objeto.
Tampoco dejó afuera la exploración, desarrollo y operación de campos de hidrocarburos, desarrollo, importación y comercialización de tecnologías relacionadas a alternativas energéticas diferentes a proveniente de los hidrocarburos. Suministro de personal especializado, asesoramiento en general, así como la ejecución o contratación de todas las tareas conexas relacionadas con este objeto.
ARGENTUM CA
Es interesante conocer que la empresa venezolana ARGENTUM CA fue creada muy poco tiempo antes que Epsur Venezuela C.A y constituida en su paquete accionario por una empresa de Barbados, a su vez poseída por una de Panamá. Lo curioso es que esta empresa de Barbados tuvo como su representante en la fusión a Marcelo Rescchia el mismo que con Batista fue tenedor de las acciones de EPSUR Venezuela CA y la otra pata de Argentum CA la constituyó el venezolano Fernando Crisanti (V-8.845.338) que posteriormente pasaría a representar los intereses venezolanos de Argentum CA
El capital de la nueva compañía quedó conformado por 9.999 acciones aportadas por Empresa Barbados, representados por Reschia y 1 (una) acción solamente que suscribió el venezolano Crisanti.
El objeto social de ARGENTUM CA de acuerdo a los registros a los que tuvo acceso OPI fue “la provisión de servicios de consultaría y asesoría en materia financiera e industrial, el estudio, planificación, desarrollo y ejecución de inversiones, análisis económicos de factibilidad de negocios, pudiendo realizar las actividades directa o indirectamente relacionadas, incluyendo la comercialización, importación, exportación, desarrollo, aplicación, distribución, arrendamiento y operación de todo tipo de tecnologías y licencias tecnológicas destinadas al mejoramiento de los procesos; toda clase de equipos, maquinarias, artículos, materiales e insumos en general destinados a los sectores industrial y comercial, entre otros: metalmecánica, salud, construcción, ambiental y de los hidrocarburos. Incluyendo la comercialización y distribución de sus accesorios y repuestos, así como el suministro de personal calificado para tales fines.
Asimismo, podrá dedicarse a la ejecución de obras civiles, viales, mecánicas y eléctricas, incluyendo las actividades propias de las prevenciones, evaluaciones y remediaciones ambientales y cualquier acto o negocio de lícito comercio que la Asamblea General de Accionista considere conveniente”.
Las fuentes que suministraron información a esta Agencia destacan un interesante punto a tener en cuenta, que demuestra la precariedad con la que se conformaron estas nuevas sociedades en Venezuela en el período 2005/ 2207. Existe una nota enviada desde Venezuela a una dirección electrónica de Argentina (se presume a Teddy Batista) donde uno de los armadores de Argentum CA comunica que no puede llegar a justificar los 100 millones de Bolivarianos que exige la Ley de ese país como capital social para la constitución de la nueva firma porque “le faltan ideas” y les pide a sus destinatarios que aporten conceptos porque con todo esfuerzo no pudo superar los 83,5 millones de Bolivarianos.
“Me faltan ideas para llegar a los 100 mm – ojo que si van a pedir soporte vamos a tener que pagar el capital social mediante deposito en banco, al menos parcialmente”, expresa el correo y a continuación se detallan los bienes que ha podido contabilizar para arrimarse al capital requerido.
PROSUR DE VENEZUELA C.A
Otra de las empresas detectadas que se crearon a partir de fusión de sociedades en las cuales los nombres se repiten, es PROSUR DE VENEZUELA CA, también con domicilio en Caracas e integrada por EPSUR S.A. y ARGENTUM CA, y en este caso como en otros la primera Junta Directiva la asumieron Orlando Batista y Marcelo Recchia por Epsur SA y el venezolano Fernando Grisanti por la participación de Argentum en la nueva empresa.
En el objeto social de Prosur de Venezuela CA se remarca “Importación, exportación, fabricación, comercialización, arrendamiento y operación de todo tipo de artículos, materiales, equipos, equipamientos, insumos y tecnologías utilizables, entre otros, en los sectores de la industria en general, de la salud, de la construcción, de la energía, catastrales, ambiental, comunicaciones. Incluyendo la comercialización y distribución de sus accesorios y repuestos, además de la prestación del correspondiente servicio de mantenimiento incluyendo el suministro de mano de obra y personal calificado. Provisión de servicios de asesoramiento y consultoría en general, incluyendo la comercialización y aplicación de tecnologías destinadas al mejoramiento de las actividades y los procesos relacionados con los temas mencionados anteriormente.
OPICA CONSULTORES CA Y EPSUR SA
Fue también en el 2006 que en el marco de las relaciones bilaterales nació una sociedad mercantil entre dos firmas que se unieron en Caracas para realizar negocios en forma conjunta. Por la parte argentina la empresa que propuso el acuerdo fue EPSUR S.A a cargo de Orlando Batista, que fijó domicilio en Pasaje Carabelas 241 6º piso de Buenos Aires – Argentina (Teléfono: 54 011 4326 3921) y por capitales venezolanos OPICA CONSULTORES C.A con domicilio en Avenida Ernesto Blohn, C.C.C.T., Sector Yarey, Mezzanina 2, Oficina 1MB, Chuao, Caracas, Venezuela , representada por el Ejecutivo de la misma nacionalidad, Carlos Alvarez Segnini.
Entre ambas empresas formalizaron lo que dieron en llamar un “Convenio de Desarrollo de Negocios” y estaba orientada hacia la explotación y exploración petrolera; de hecho en el objeto empresario figura “Exploración orientada al descubrimiento de áreas prospectivas para la acumulación de reservas de hidrocarburos, incluyendo la adquisición, procesamiento e interpretación de sísmica, así como otros métodos geofísicos, geoquímicos y perforación exploratoria. Producción de hidrocarburos abarcando los procesos de subsuelo y superficie relacionados con estudios y análisis de yacimientos, perforación de pozos, trabajos de rehabilitación y estimulación de pozos, extracción y levantamiento artificial de petróleo y gas, manejo de fluidos, tratamiento de emulsiones, acondicionamiento de crudo y agua, diseño, diagnóstico y evaluación de instalaciones y sistemas de producción complejos, identificación de ineficiencias en los procesos de superficie y acciones de remediación, soluciones para el control de incrustaciones, corrosión y gerencia del agua. Ingeniería, procura y construcción de infraestructura para la producción, acondicionamiento, transporte, almacenamiento, procesamiento y despacho de hidrocarburos” entre otros conceptos de una larga lista que no deja afuera ningún elemento concerniente al negocio petrolero.
EPSUR S.A. la empresa insignia
Epsur S.A fue desde sus inicios en el 2005, una empresa destinada a manejar los negocios petroleros del grupo económico que lidera Lázaro Báez y tanto Orlando “Teddy” Batista como Fernando Butti y el hijo de Lázaro, Martín Báez ,la han representado en distintas épocas como a Misahar que se encuentra dentro del conjunto de empresa perteneciente al amigo presidencial quien tiene bajo su control a Austral Construcciones SA, Austral Agro S.A, Austral Atlántica S.A, Austral Desarrollos Inmobiliarios S.A y de Diagonal Sur Comunicaciones. Este grupo también, controla a la constructora Gotti SA, la cual estuvo a cargo del contador Fernando Butti, caído en desgracia luego de que descubrieran su deslealtad, sin embargo, en algún momento representó en Buenos Aires a Epsur y Misahar y manejó Alucom Austral Consultora.
Las vinculaciones y connivencia de la empresa EPSUR SA con ENARSA (empresa estatal constituida para entrar en el negocio petrolero con participación del Estado) son notables, hasta involucrar directamente al presidente de la estatal Exequiel Espinosa (hombre de Cristóbal López y uno de los pocos que sobrevivió al valijagate) al punto que su domicilio fiscal estuvo desde el inicio radicado en una propiedad donde funciona Epsur S.A. La información que trascendió públicamente indicaba que se incurrió en la violación de la Ley de Etica Pública por parte de Espinosa que además de recibir sobresueldos de parte del Estado nacional, estuvo siempre vinculado a las empresas del zar del juego.
La empresa EPSUR SA que Lázaro Báez destinó a ser nexo con los negocios venezolanos, se vio involucrada en un escándalo cuando hace dos años ganó una concesión millonaria para explotar cuatro áreas petroleras en Santa Cruz. En las especulaciones que se hicieron al respecto, se puso en duda la capacidad de EPSUR SA para hacerse cargo de un negocio multimillonario, cuando su creación data del 2005. Sin embargo la cosa no terminó allí, porque posteriormente obtuvo permisos de explotación en dos yacimientos de Chubut y uno en Mendoza, lo cual abre especulaciones en relación a si ha sido el propio Espinosa quien, desde la empresa estatal Enarsa, fue el favorecedor de la petrolera de Santa Cruz.
Para la misma época, el 30 de abril de 2010, el minsitro De Vido era señalado por realizar lobby en favor de Pescarmona para la construcción de una nueva represa en Yacyretá.CSLOG Equipo de Comunicaciones, redactó un reporte al respecto:
El ministro argentino de Planificación, Julio de Vido, involucrado hoy en una denuncia de corrupción con empresarios de su país, quienes cerraron negocios con Venezuela, es conocido en Paraguay por sus reiteradas intenciones de que la binacional Yacyretá concretara la construcción de la represa de Aña Cua y así poder beneficiar a la empresa Pescarmona, para quien estuvo haciendo lobby.
Presionó durante el gobierno de Nicanor Duarte Frutos y ahora en el de Fernando Lugo. El ministro de Planificación de la Argentina, Julio de Vido, a toda costa pretendió cerrar con nuestro país, a través de la binacional Yacyretá, el negocio de Aña Cua. De Vido está hoy metido en el centro de un escándalo que lo involucra en supuestos cobros de coimas a empresarios argentinos para que estos cierren negocios con Venezuela. La denuncia fue hecha por el ex embajador de la Argentina en Venezuela, Eduardo Sadous, y el caso ya está siendo investigado por la justicia del vecino país.
De Vido, quien es considerado uno de los hombres más importantes de la administración Kirchner, había hecho una sigilosa y breve visita a nuestro país, el 8 de octubre de 2008, dos meses después de la asunción de Lugo.
La presencia del alto funcionario sorprendió incluso al jefe de gabinete de la presidencia de la República, Miguel Angel López Perito, quien confirmó que el visitante llegó con la intención de tratar el tema de la cota de Yacyretá, pero fundamentalmente lo referente a la construcción de la represa de Aña Cua y el proyecto Corpus.
Lo llamativo de la visita había sido que no figuraba en la agenda oficial de Lugo y el ministro argentino llegó en un vuelo privado que aterrizó en el Grupo Aerotáctico. La reunión había durado una hora aproximadamente y tras el encuentro partieron inmediatamente a Buenos Aires.
El entonces director de Yacyretá, Carlos Cardozo, quien había participado de la reunión, manifestó que la intención del ministro de Planificación planteó el tema de la conveniencia de retomar ciertas obras como la usina auxiliar que debe construirse en las cercanías del actual vertedero del brazo Aña Cua, que había sido suspendida por Nicanor.
De Vido fue quien hizo lobby para que la binacional, a través de la figura del “iniciador privado”, contratara a la empresa Industrias Metalúrgicas Pescarmona S.A. (IMPSA) para las obras de Aña Cua.
La figura le otorga un 8% de preferencia en la convocatoria y, de hecho, ya la hace acreedora, como regalía, de la suma de US$ 16.000.000, aún en caso de no resultar adjudicada con la obra. Los pliegos obligan al pago del 4% sobre el monto presupuestado de los trabajos y que están estimados en los US$ 400 millones.
Finalmente, el proyecto no se concretó, ante las denuncias de que se trataba de un negociado. Detrás de la contratación de la empresa de Pescarmona estuvo el propio ministro De Vido, incluso se mencionó que, si lograba la contratación, se iba a beneficiar con una importante comisión, que supuestamente habría sido cobrada con antelación.
Este proyecto no fue abortado del todo, ya que todavía existe la intención de reflotarlo ahora durante el gobierno de Lugo.