Brasil fabricó el año pasado 3,34 millones de vehículos, un 1,9 por ciento menos que en 2011, pese a que las ventas crecieron 4,6 por ciento hasta el récord de 3,8 millones de unidades.
Según los datos divulgados hoy por la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores (Anfavea), la fuerte demanda interna impidió que la producción sufriera una caída mayor, ya que las ventas externas sintieron el efecto de la crisis económica global.
El número de vehículos exportados por las terminales brasileñas se redujo 20,1 por ciento, desde 553.334 unidades en 2011 hasta 442.075 unidades en 2012.
A su vez, los ingresos de los fabricantes por sus exportaciones cayeron 9,3 por ciento, desde 16.230,3 millones de dólares en 2011 hasta 14.720,9 millones de dólares en 2012.
Respecto de diciembre, la producción tuvo una caída mensual de 14 por ciento al totalizar 259.364 vehículos. Sin embargo, fue 0,1 por ciento superior a la del mismo mes de 2011.
A su vez, las ventas a fines de 2012 sumaron 359.355 vehículos, 15,3 por ciento más que en noviembre y 3,1 por ciento por encima de lo que las concesionarias brasileñas colocaron en diciembre del año anterior.
Y los 41.194 vehículos exportados, si bien implicaron una caída de 19,3 por ciento respecto de diciembre de 2011, tuvieron un repunte de 12,7 por ciento al ser comparadas con las 36.536 unidades embarcadas en noviembre último.
Brasil es el principal destino de las exportaciones de vehículos fabricados en Argentina: durante el año pasado se colocaron 340.165 unidades, el 82,3 por ciento del total y el 54 por ciento del total de unidades producidas.