El Gobierno nacional analiza la forma de pagar el vencimiento de los intereses del Global 2017 y del cupón PBI, que se producirá el 2 de diciembre, sin que los fondos buitre o la Justicia de Nueva York bloqueen la operación.
La idea que tiene más fuerza en el Ministerio de Economía y en los abogados argentinos es la de continuar cumpliendo con los pagos como hasta ahora, porque "el canje está armado de manera tal que el flujo de fondos está a salvo de cualquier medida de estas características", según indicó al diario Ambito Financiero uno de los letrados que participó de los canjes de deuda de 2005 y 2010.
El pago de los compromisos fuera de Estados Unidos sólo se haría si se considera imposible depositarlos en el Bank of New York.
Pero la principal duda se genera porque al concretar el pago a los bonistas que ingresaron al canje, Argentina estaría desconociendo a la Justicia de Estados Unidos, y en especial al juez Thomas Griesa, quien emitió un fallo para que también se pague a los "holdouts" por el principio de "pari passu" (igualdad de trato).
Al mismo tiempo, en caso de que el Gobierno nacional siga pagando sólo a quienes ingresaron al canje, se corre el riesgo de que se declare en default la deuda Argentina porque la reestructuración dejó afuera al 7 por ciento de los acreedores.
Los bonos poscanje podrían entrar en default si la Corte de Nueva York ordena separar una porción de los fondos que Argentina destina a pagarles, para cancelar la deuda con los "holdouts". En ese caso, los bonistas que entraron en los canjes -que totalizan el 93 por ciento del total impaga tras la crisis de fines de 2001- no cobrarían la totalidad de sus acreencias.
Pero según un informe de la consultora Empiria, que dirige Hernán Lacunza, el Gobierno tiene varias alternativas: seguir pagando como lo viene haciendo, o depositar los fondos en otra jurisdicción, aunque después se deberían girar los fondos a través de cámaras compensadoras como Euroclear, para que cada inversor reciba el dinero de su cuenta. Con eso se buscaría evitar que se embarguen los fondos, pero se caería en default técnico porque no se cumpliría con el lugar de pago especificado en la emisión.
Una tercera alternativa sería reabrir el canje y negociar con los "holdouts", aunque Hernán Lorenzino, ministro de Economía, descartó esa posibilidad.
Mientras tanto, el fondo NML deberá presentar hoy al juez Griesa un escrito con el detalle del monto que pretende cobrar de Argentina para cancelar la demanda que le inició por los bonos en default. Una vez que el fondo presente el detalle, Argentina tendrá 72 horas para presentar un plan de pagos, lo que sucedería este viernes.
Ese fondo es además, el que logró que se retuviera la Fragata Libertad en Ghana.
Pero la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner advirtió ayer, durante un acto que se realizó en Villa Constitución, Santa Fe, que "no vamos a aflojar".