La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, resaltó que con planificación y políticas acertadas su gobierno consiguió proteger la economía, los sectores productivos y el empleo, al hacer un balance del 2011."Trabajamos mucho este año para hacer de Brasil un país cada vez mejor y más justo; y vamos a trabajar aún más en 2012 para continuar avanzando", aseveró este martes Rousseff en un mensaje a los lectores de su habitual columna de los martes `Conversa con la presidenta´.ecordó que el año que finaliza no fue fácil para el mundo y que en Brasil "percibimos con antelación el rumbo de la crisis internacional y nos preparamos", por lo que "Brasil creció este año frente a un escenario mundial negativo", remarcó."Cuando la mayoría de los países desarrollados enfrentaron desempleo, nosotros creamos hasta noviembre pasado más de dos millones 300 mil nuevos puestos de trabajo, y nuestra tasa de desocupación fue de 5,2 por ciento, la menor de la serie histórica, iniciada en 2002", destacó la mandataria.En el mensaje reproducido por la agencia Prensa Latina, destacó: "Batimos la cota histórica de exportaciones, atrajimos volúmenes récords de inversiones externas directas, y nuestras reservas internacionales sobrepasaron los 350 mil millones de dólares"."Lo más importante es que concluimos el año sin abrir mano de dos principios fundamentales para el país: Crecimiento económico con distribución de renta", sostuvo Rousseff, y subrayó que "2012 será una oportunidad más de consolidación del modelo brasileño".Adelantó que el próximo año comenzará con un fuerte incremento del salario mínimo (pasará de 545 a 622 reales (de 300 a 340 dólares) y con reducción de impuestos, y que "continuaremos apoyando la compra de casa propia y subsidiando la construcción de viviendas para la población de baja renta".
telam