El Parlamento húngaro tiene previsto aprobar hoy el Presupuesto para 2012, basado en un proyecto sujeto a eventuales cambios y presentado por el Gobierno en septiembre, que prevé unos ajustes de unos 2.400 millones de euros y pronostica un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 1,5%. La prensa económica local señala hoy que dichas cifras estarían aún sujetas a modificaciones, puesto que semanas después de su aprobación por el gabinete conservador de Viktor Orbán, la agencia de evaluación de riesgos Moodys rebajó, el pasado viernes, la calificación de la deuda soberana húngara al nivel de bono basura.